Personas con discapacidad tuvieron que acudir a las casillas con familiares que les ayudaran a votar, pues no hubo condiciones para que pudieran ejercer su derecho.
Este domingo acudió con su familia a la casilla que le corresponde, en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, donde le brindaron diez boletas para elegir a los integrantes del Poder Judicial federal y local, aunque reconoce que “la verdad en el ámbito estatal no conocía a nadie porque no tuve información”, por lo que sólo votó por cargos federales, de los que supo “por análisis políticos en Tik Tok”, ya que la plataforma para conocer las candidaturas no era 100% accesible.
Debido a que en esta ocasión el voto tenía que escribirse con un número en papeletas que no tenían marcaje en braille, Brenda necesitó apoyo de uno de sus familiares, quien también la ayudó para que las depositara en las urnas correspondientes, un proceso que le llevó aproximadamente 25 minutos.
Aún cuando pudo ejercer su derecho, Lara reclamó que “esta elección no se garantizó la participación efectiva de personas con discapacidad en el voto, pero tampoco en la selección de candidaturas”, lo que consideró lamentable, dado que “ya habíamos avanzado en la perspectiva de inclusión, y fue gracias al Poder Judicial, pero ahora se presentan estos retrocesos y la incertidumbre de no saber si quienes lleguen van a ser aliadas y aliados”.
María, quien tiene movilidad reducida por el dolor crónico que le produce la espondilitis anquilosante, no acudió a votar aunque le parecía importante participar en la elección.
“En las elecciones anteriores pude ir porque alguien me pudo llevar, pero es un problema desde siempre el sólo hecho de llegar a la casilla para quienes no podemos salir de casa, debería haber opciones para la gente que está en cama, pero no veo accesibilidad en ese nivel“, mencionó.
En entrevista, expresó que el no haber acudido a las urnas “me pesa, porque es un reflejo de cómo las personas con discapacidad no somos ciudadanos completos, en el sentido de que no hay alternativas para que votemos, porque no nos están considerando como merecedoras de tener voz”.
El reclamo en las urnas por los derechos de las personas con discapacidad
La falta de medidas para el voto de personas con discapacidad fue motivo de reclamo por parte de distintas organizaciones, quienes estuvieron en diálogo con el Instituto Nacional Electoral (INE) durante el periodo de organización de las elecciones; sin embargo, la respuesta que obtuvieron es que el Poder Legislativo no autorizó presupuesto suficiente para realizar los ajustes necesarios.
Ernesto Rosas, de la Confederación Mexicana de Organizaciones en favor de las Personas con Discapacidad Intelectual, explicó en entrevista que pese a que en diversas ocasiones se insistió en la necesidad de ajustes, “la respuesta es que no hubo recursos y que no pudieron hacer gran cosa, lo que anuló la posibilidad de acceso para algunos y se dejó como única alternativa ir con una persona de confianza a votar”.
Ante estas limitantes, Libre Acceso AC –organización que también participó en los diálogos con el INE– llamó a protestar en las urnas contra la falta de condiciones para el ejercicio del voto, “como recordatorio para la ciudadanía de que no podemos normalizar que las personas con discapacidad no puedan votar“, dijo en entrevista Laura Bermejo, directora de esta asociación.
Con mensajes como “Sin voto accesible no hay democracia” o “si las personas con discapacidad no pueden votar yo tampoco”, algunos ciudadanos que acudieron a las urnas expresaron su inconformidad y compartieron los mensajes a través de redes sociales.
En el caso de Silvia Lozano, quien vive con discapacidad visual en la Ciudad de México, acudió para anular su voto y al salir de la casilla comentó: “No fue una elección accesible, ha sido un retroceso del INE porque en anteriores ya se habían tenido algunos logros como las plantillas braille… qué mal que los formatos no son accesibles y que no hay ajustes razonables”.
Y cuestionó: “¿qué podemos esperar del Poder Judicial que va a entrar?, ¿también un retroceso?”.
“Retroceso violenta la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad”, señalan activistas
“Todas esas cosas en definitivo no se consideraron, pese a que muchas de ellas fueron señaladas al INE por organizaciones, no se tomaron en cuenta, aunque anteriormente estaban garantizadas. Al final no fue un ejercicio accesible porque no se garantizó que las personas con discapacidad pudieran ir a votar”, agregó.
De acuerdo con Laura Bermejo, la falta de condiciones para el voto de las personas con discapacidad, además de ser un retroceso, “violenta los derechos reconocidos en la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, que en su artículo 29 establece que se debe garantizar que puedan participar plena y efectivamente en la vida política y pública, en igualdad de condiciones con las demás”.
“Sobre la marcha las autoridades hicieron algunos ajustes, pero terminaron siendo parches que no solucionaron los problemas de fondo y la respuesta del INE fue amable, al reconocer que tuvieron errores, pero no fue suficiente”, lamentó.
Frente a este panorama, Ernesto Rosas comentó que los colectivos de personas con discapacidad “vamos a evaluar todo tipo de acciones para hacer valer nuestros derechos y que no quedemos ocultos, que no se piense que ya pasó… Hay que mantener el tema presente y que se garantice que habrá presupuesto para los ajustes que requiere la población”.
“No es un asunto de dispendio de recursos y desafortunadamente el recorte presupuestal perjudicó a quienes seguimos siendo considerados como grupos en condición de vulnerabilidad; hoy más que nunca se está ratificando esta situación, pues nos quedamos al margen de hacer valer nuestros derechos electorales“, apuntó.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: ERÉNDIRA AQUINO.
