La Fiscalía General de la República (FGR) clasificó como información reservada y confidencial los avances que en el actual sexenio se han integrado a la averiguación previa abierta por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, pese a que dicha investigación ya había sido desclasificada desde el 2015 por orden del Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la información (INAI).
Los nuevos tomos del expediente que se han reservado contienen los datos, diligencias y hallazgos con los que la FGR y el gobierno federal han sustentado – al menos en el discurso– que se “ha caído la verdad histórica” del caso, y que hay nuevas líneas de investigación en curso.