La mentira sale a la luz cuando se lee el Informe Policial Homologado, al que Proceso tuvo acceso, y en el que el teniente de infantería José Luis “N” describe un enfrentamiento que nunca ocurrió.
En el informe, el militar narra que el 18 de mayo, aproximadamente a las 14:30 horas, comandaba una unidad compuesta por 17 soldados en tres vehículos oficiales cuando observó una camioneta pick up Cheyenne color gris que, al notar la presencia de los soldados, “se retornó y aceleró tratando de evadirnos”.
En la persecución, el vehículo sospechoso se estrelló contra la barda perimetral de una tienda ubicada en Prolongación Monterrey, entre Emiliano Zapata y Lago de Chapala, en la colonia Los Encinos.
Los soldados rodearon la camioneta apuntando con sus armas a los tripulantes, que se rindieron en el momento. De la camioneta, los soldados bajaron varias armas, entre ellas una Barret calibre .50.
En su reporte, el teniente de infantería asegura que los detenidos contaban con “equipo táctico tipo militar con estampas del Cártel del Noreste, y que la camioneta contaba con blindaje de fábrica”.
Tras desarmarlos, los individuos fueron bajados del vehículo y llevados, a patadas y empujones, a la barda perimetral de la tienda. Uno de ellos es arrastrado aparentemente inconsciente; otro tiene una venda en la cabeza y uno más ya va esposado.
Hasta aquí, el Informe Policial Homologado narra los hechos tal como ocurrieron. Pero enseguida comienza a describir el enfrentamiento ficticio.
En su informe, José Luis “N” asegura que mientras proporcionaban atención médica a los tripulantes de la camioneta, “el personal que integra mi base de operaciones fue agredido con armas de fuego por personas de la delincuencia organizada en un intento de rescatar al personal que teníamos en el lugar”, es decir, los cinco hombres que se accidentaron.
El militar describe luego un escenario de terror: “Los disparos venían de todas direcciones, incluso de la maleza”.
Asegura también que los tripulantes de la Cheyenne intentaron recuperar sus armas para escapar. Dice incluso que “un civil estaba cubierto con una venda y lo iban empujando en dirección a la parte trasera de la tienda”.
Según el Informe, los soldados repelieron la agresión y, al terminar la balacera, encontraron que cuatro de los cinco tripulantes de la Cheyenne estaban muertos, y uno más gravemente herido.
Lo que ocurrió en realidad
En el video se narra que, mientras los militares sometían a los tripulantes de la Cheyenne, a tres cuadras de distancia ocurría un enfrentamiento armado.
El sonido de la balacera fue aprovechado por los soldados y uno de ellos comenzó a disparar con su pistola a los tripulantes de la Cheyenne. Luego se suman otros dos militares que les disparan con sus fusiles, mientras un soldado más realiza disparos contra la maleza y luego a los civiles.
Poco después, el militar que disparó con su pistola utiliza un trapo rojo como guante para tomar las armas incautadas y sembrarlas junto a los civiles muertos para escenificar el enfrentamiento.
Una hora y 17 minutos después, los militares permiten que paramédicos atiendan al civil que quedó gravemente herido, quien murió al llegar al hospital general.
Las esposas
Más de una hora después de que se permitió el acceso a paramédicos, y ya sin personal civil en el área, uno de los militares revisa a los fallecidos y se da cuenta que uno de ellos todavía está esposado, por lo que le pide la llave a un compañero y le libera las manos.
En el video de la ejecución se asegura que los fallecidos fueron identificados como José Ángel, de 27 años de edad; Jorge Antonio, de 32; Edgar Chavarría, de 38; José Isabel, de 23, y Clinton Alex, de 25 años.
Si bien los militares a cargo de la seguridad en Tamaulipas ya habían protagonizado múltiples ejecuciones extrajudiciales, es la primera vez que una de ellas es grabada a detalle en video.
El resto se han basado en videos parciales o testimonios, como la ejecución de un hombre y una menor de edad con ocho mese de embarazo en abril pasado.
En ese caso, una familia fue baleada sin previo aviso por elementos de la Guardia Nacional cuando circulaban en Nuevo Laredo sobre la carretera federal Nuevo Laredo-Piedras Negras.
Otro caso reciente fue el homicidio de cinco jóvenes en Nuevo Laredo. En este caso, cuatro camionetas con militares persiguieron y dispararon a los jóvenes. Por este caso, un juez federal procesó a cuatro soldados presuntamente relacionados con el ataque.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: LUCIANO CAMPOS GARZA.
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