Un mes después del asesinato de Javier Valdez en Culiacán, Sinaloa, periodistas del estado reclaman que el crimen sigue impune, y que el gobierno del priista Quirino Ordaz Coppel no ha cumplido con acciones que les prometió, apenas unas horas después del crimen.
“Fueron solo palabras, todo sigue igual, hoy no sabemos quién asesinó a Javier”, reclamaron los periodistas desde la entidad azotada por la violencia del narcotráfico, tema que cubrió Valdez, dejando crónicas que quedaron plasmadas en libros como Malayerba y Huérfanos del narco.