Solo en 2022, de acuerdo con datos del propio organismo, se tiene registro del hurto de 4 mil 707 metros de cable, lo que se traduce en un impacto a sus finanzas por alrededor de 50 millones de pesos. La póliza vigente solo cubriría el 10% de esa cantidad.
“Queda convenido que el asegurado no se obliga a presentar denuncia de hecho ante el Ministerio Público competente en robos de cable, equipo electrónico, robo de contenidos, mercancías, dinero y valores, objetos raros y de arte si se estima que la pérdida es igual o menor a 300 mil pesos”, detallan los anexos de la póliza del seguro que el Metro contrató para 2023.
El SCT otorgó dicho contrato por adjudicación directa y Animal Político tuvo acceso al documento vía transparencia.
El robo de cable es una problemática que el Metro ha tenido que enfrentar permanentemente. Entre 2019 y 2022, es decir, en lo que va de la presente administración, el STC tiene registro del robo de 14.5 kilómetros de cable que, si bien el seguro tiene que pagar, representa un monto para el cual la cobertura no es suficiente.
De acuerdo con Guillermo Calderón, director del Metro, en estos actos están involucrados grupos del crimen organizado, aunque a la fecha apenas se tiene conocimiento de dos detenciones por este delito.
Nueva aseguradora para 2023
La póliza del seguro del Metro para este año destaca, como ha pasado en los últimos años, el cambio de proveedor del servicio.
Se trata de la póliza de seguro “Todo bien Todo riesgo, integral de seguro de daño del STC”, que se adjudicó directamente a la empresa Seguros Azteca Daños por 504 millones 800 mil pesos, los cuales se deberán pagar en ministraciones mensuales de 42 millones 066 mil pesos. La póliza garantiza la cobertura del STC desde las 00:00 horas del pasado 1 de enero y hasta las 24:00 horas del 31 de diciembre próximo.
El límite máximo de responsabilidad que tiene la aseguradora con el Metro, por uno o distintos eventos, es de 5 mil 318 millones 230 mil pesos. El Metro puede cancelar en cualquier momento el servicio, sin que esto le implique una penalización.
“El prestador de servicios acepta que el STC por causas de interés general o por así concebir al objeto y fines para los que fue creado, y sin responsabilidad para el mismo, podrá dar por terminado en cualquier momento el presente contrato, quedando obligado únicamente a liquidar los servicios que a la fecha de la terminación del mismo haya realizado. El STC notificará fecha terminación al prestador de servicios con cinco días hábiles de anticipación”, especifica la cláusula decimoquinta del contrato.
Bienes muebles e inmuebles, equipo rodante (trenes, vehículos y equipos auxiliares), maquinaria, vías, equipo electrónico, robo de cable, calderas, dinero, rotura de cristales, objetos raros y arte, así como la responsabilidad civil —tanto general como con los usuarios— son algunos de los riesgos amparados por el seguro.
Respecto de colisión y descarrilamiento de trenes, como ocurrió en el choque acontecido el sábado 7 de enero pasado, cuando murió una joven de 18 años y 106 personas resultaron lesionadas, la póliza vigente contempla un pago máximo de 800 millones de pesos, lo cual se puede cubrir en un solo evento o en distintos que pudieran presentarse a lo largo del año.
“En caso de que lo solicite, el STC y en términos de lo establecido en el procedimiento de adjudicación directa (…) el prestador de servicios se obliga a otorgar el incremento en la cantidad de los servicios requeridos mediante modificaciones al contrato vigente por un monto ilimitado siempre y cuando se encuentren en el mismo ejercicio presupuestal y que el precio y demás condiciones sean igual a lo inicialmente pactado debiéndose ajustar la garantía de cumplimiento de contrato”, detalla el documento, firmado el 30 de diciembre pasado.
Entre los riesgos excluidos se encuentran las “pérdidas o daños ocurridos como consecuencia de corrosión, agotamiento, deterioro gradual, defecto inherente, oxidación, descomposición, humedad o en seco, humedad ambiental y errores en el procesamiento o fabricación de un producto”.
Sobre la responsabilidad civil para con los usuarios del sistema, la póliza cubre la asistencia médica necesaria para el restablecimiento de las lesiones, pérdida de miembros, incapacidad parcial temporal o permanente, incapacidad total permanente, daño moral, gastos funerarios e indemnización por muerte.
FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: DALILA SARABIA.
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