Entre los detenidos también se encuentran integrantes de la comunidad otomí residente en la Ciudad de México, de medios de comunicación y de organizaciones indígenas e internacionales que forman parte de la Caravana por el Agua y por la Vida, quienes acompañaban a las familias triquis para protestar por el desalojo y la reubicación cuando los granaderos los encapsularon.
Alrededor de las 20 horas iniciaron los encapsulamientos por parte de la policía, uno en la calle Plomo 65 y Ferrocarril Hidalgo, con alrededor de 17 personas rodeadas por un grupo de 250 granaderos; y otro en calle Mapimi 5 y calle Plomo, con un grupo de 30 personas atrapadas, incluidos menores de edad, por alrededor de 100 granaderos.
La organización Artículo 19 reportó que durante los encapsulamientos hubo al menos una agresión física y bloqueos informativos por parte de los elementos de seguridad capitalina contra los comunicadores que cubrieron la protesta en apoyo a las familias triquis, y recordó que conforme al Protocolo de Actuación en Protestas «no se deben generan encapsulamientos», sino «garantizar la integridad y el libre ejercicio del derecho a la protesta y la libertad de expresión».
En solidaridad con las víctimas, la comunidad otomí que mantiene tomadas las instalaciones del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) bloqueó la madrugada del martes la avenida México-Coyoacán y quemó documentos del lugar en protesta por el desalojo de las familias triquis y la represión a los pueblos en la capital.
Por su parte, los integrantes de la Caravana por el Agua y la Vida convocaron a una movilización la mañana de este martes en repudio al “secuestro político” de los pueblos triqui y otomí y de la delegación de la Caravana, en el ayuntamiento de la Ciudad de México frente al Zócalo.
La madrugada del lunes, cientos de policías capitalinos desalojaron el campamento de las familias triquis, desplazadas de Tierra Blanca Copala, Oaxaca, que desde hace 15 meses exigían seguridad y ser retornadas a su comunidad frente al Palacio de Bellas Artes en la Ciudad de México.
Los policías llegaron al campamento y cercaron a las familias, mientras que personal de limpieza comenzó a desarmar el plantón y a tirar a la basura sus pertenencias. Los triquis fueron trasladados a un “albergue” improvisado y de lonas en la alcaldía Venustiano Carranza.
AUTOR: REDACCIÓN.
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