viernes, 12 de abril de 2024

El entrenador cubano abusador sexual que Iridia Salazar protege

A sabiendas de que ha acosado y abusado sexualmente de otras deportistas, la directora del Instituto del Deporte de Querétaro (Indereq) decidió contratar a Ignacio Guanche porque es amigo de su esposo. Su nueva víctima es una menor de edad.

Una deportista mexicana menor de edad denunció penalmente al entrenador Ignacio Guanche Amador, un cubano de 75 años, quien en enero último la agredió sexualmente en las instalaciones del Instituto del Deporte y la Recreación del Estado de Querétaro (Indereq). Desde entonces ha sido revictimizada y acosada por sus compañeras de equipo, padres de familia y las propias autoridades de este organismo que dirige la medallista olímpica Iridia Salazar.

Antes de presentar una denuncia de hechos en la Unidad Especializada en Delitos Sexuales y Violencia Familiar de la Fiscalía General del Estado de Querétaro, la madre de la deportista intentó acercarse a Iridia Salazar, pero la servidora pública nunca la recibió. También se apersonó en las instalaciones deportivas para confrontar a Ignacio Guanche, pero el metodólogo Óscar Juanz Roussell y la coordinadora jurídica del Indereq, María Fernanda Herrera De Granda, le dijeron que llenara un formato de queja para supuestamente aplicar el Protocolo para prevenir, atender y sancionar el acoso y hostigamiento en razón de género en el ámbito laboral del Poder Ejecutivo del estado de Querétaro y sus entidades.

Ambos funcionarios fueron los primeros en desanimar a la madre de la víctima. Le dijeron que sin testigos “no pasaría nada” y le advirtieron que no se le ocurriera denunciar.

La denuncia por el probable delito de acoso y abuso sexual fue presentada el 23 de febrero último y quedó asentada en la carpeta de investigación número CI/QRO/6514/2024. La investigación se encuentra en la etapa inicial y de recopilación de pruebas. Como parte de las mismas a la denunciante se le han realizado diversos estudios periciales.

La deportista, cuyo nombre se omite por tratarse de una menor, comenzó a entrenar con Ignacio Guanche en octubre de 2023, en el gimnasio de levantamiento de pesas o halterofilia, en la instalación conocida como Parque Querétaro 2000. Llegó con él porque así lo instruyeron los metodólogos del Indereq, quienes le vendieron la idea de que el cubano “puliría sus cualidades deportivas” y obtendría mejores resultados.

Apenas un mes después el entrenador comenzó a hostigar a la deportista con comentarios como que se parece mucho a su esposa, que tienen el mismo tono de cabello. Después, el acoso subió de tono. En repetidas ocasiones le dijo: “¡Híjole, te creció el culo!”, “ya tienes muy grande el culo y además tienes muy anchas las caderas”. Ignacio Guanche siempre esperaba a que estuvieran solos en el gimnasio para acosar verbalmente a su alumna menor de edad.

El acoso continuó hasta que la niña no pudo más. Le informó a su mamá que ya no quería ir a entrenar porque tenía miedo de estar a solas con el entrenador. Le contó que Guanche siempre se las arreglaba para mantenerla aislada de los demás integrantes del equipo.

“La empecé a ver muy distinta, que se ponía ropa muy holgada, dormía casi todo el día, lloraba, no quería comer. Uno se da cuenta de ese tipo de situaciones raras porque uno conoce a sus hijos y sabe que no es normal, ya no era mi hija”, cuenta la madre, cuyo nombre también se omite para que su hija no pueda ser identificada.

Fue entonces que la menor le relató a su mamá la agresión que sufrió por parte de Guanche. Los hechos ocurrieron en el área designada para taekwondo. Ya había terminado una primera rutina de ejercicios que le marcó, por lo cual el entrenador le pidió que tomara un descanso antes de continuar.

La halterista se acostó bocabajo sobre uno de los tapetes y pasados unos 10 minutos sintió que alguien se hincó a su lado. Era Guanche. El hombre comenzó a acariciarle la espalda y a decirle: “Relájate, estás muy tensa; te voy a tronar la espalda”. Posteriormente sus manos tocaron los glúteos de la deportista y ella se paralizó. Pensó en levantarse, pero su cuerpo simplemente no respondió.

El entrenador se puso de pie y al mismo tiempo, sobre la ropa de la menor, introdujo sus dedos en medio de los glúteos y después se fue como si nada. Ella tardó en incorporarse y cuando lo hizo dio de vueltas por el gimnasio asustada. Fue incapaz de articular una sola palabra.

“Yo me entero a la semana y fui (al Indereq) para armar un desmadre. Las autoridades (Juanz y Herrera) me dijeron que como no hubo testigos no iba a pasar nada y que el entrenador seguirá ahí sin ninguna repercusión. Él (Guanche) dice que se impulsó para poder levantarse y ése es su argumento, que se quería levantar y por error le metió los dedos en los glúteos a mi hija”, explica la señora.

“Le pedimos a Iridia que no lo contratara”

Como Iridia Salazar no se interesó en atender el caso, la madre de la menor denunciante acudió a la Asociación Queretana de Levantamiento de Pesas, que preside Juan Manuel Alegría, para pedirle ayuda. Él le comentó que el organismo que preside, así como el presidente de la Federación Mexicana de Levantamiento de Pesas (FMLP), Rosalío Alvarado, ya estaban enterados de que éste es un tipo de conducta que caracteriza al entrenador Ignacio Guanche, razón por la cual ambos hablaron con Iridia Salazar para pedirle que no lo contratara.

El entrenador Guanche fue despedido y vetado en 2005 por el Consejo Estatal para el Fomento Deportivo (Code) Jalisco por haber incurrido “en acciones no éticas” relacionadas con acoso y abuso sexual a otras deportistas.

“El licenciado Alegría me dijo: ‘Señora, nosotros avisamos a Iridia con documentación de que él había hecho algo indebido allá (en el Code)’. A Iridia le importó un comino, ella tenía información de que el entrenador tenía antecedentes y aun así lo contrató. También me dijeron que es amigo muy cercano de su esposo (el taekwondista en retiro Gessler Viera, quien también es cubano). Yo ni siquiera sabía que ella estaba casada con un cubano. Todo me cayó de sorpresa cuando comencé a investigar para que se hiciera justicia por mi hija”.

Ante la insistencia de la mamá de la denunciante, Juan Manuel Alegría le dijo que lamentaba mucho la situación, pero lo único que podía hacer era vetarlo de dicha asociación y de la Federación de Levantamiento de Pesas para que no pueda participar en eventos oficiales.

La reportera buscó a Fernando Ortega, director del Code, para saber si existe algún expediente o notificación para alertar a otros institutos sobre su comportamiento. Sin embargo, la directora de comunicación social de la dependencia, Sonia Gamiño, negó la entrevista con el argumento de que “se trata de administraciones pasadas”.

Por instrucciones de Rosalío Alvarado, Juan Manuel Alegría tampoco aceptó abordar el tema “hasta que lo resuelva la autoridad”.

La halterista menor de edad sigue yendo a entrenar a las instalaciones del Indereq y también estudia en el Colegio de Bachilleres 13, escuela que forma parte del proyecto de Talentos Deportivos, una iniciativa del estado de Querétaro para desarrollar deportistas de alto rendimiento.

El fin de semana del 5 al 7 abril último se llevó a cabo en Tepic, Nayarit, el Macro Regional de Levantamiento de Pesas rumbo a los Juegos Nacionales de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), a donde la halterista viajaría como parte de la selección de Querétaro. Por lo tanto, la Fiscalía le otorgó medidas de protección urgentes y notificó al Indereq para que Ignacio Guanche no viajara con el equipo. No obstante, lo dispuesto sólo tiene validez en el estado, así que la institución que dirige Iridia Salazar determinó que el cubano acompañara al equipo representativo.

En la competencia, la deportista ganó una medalla de plata en la categoría Sub-17 y también calificó a los Juegos Nacionales. Como debe seguir con su preparación deberá presentarse en el mismo gimnasio donde todos los días está Ignacio Guanche, aunque ahora está a cargo de Saúl González, el jefe de entrenadores de halterofilia.

“Ella me dice que no dejará de ir a entrenar, pero todos los días es una batalla contra ella misma. Me dice: ‘Mamá, he trabajado tanto tiempo para lograr cosas importantes, ¿por qué me lo va a quitar él?’. Quiere hacerse la fuerte, pero a la vez sigue siendo una niña”, relata entre lágrimas la mamá de la deportista.

La madre también cuenta indignada que una ocasión personal del Indereq intentó sacar a su hija del gimnasio para llevarla a las oficinas sin su supervisión. Esto ocurrió cuando ya era del dominio público en la instalación deportiva lo que Guanche le había hecho.

También denuncia que el metodólogo Óscar Juanz se acercaba a su otra hija que también practica halterofilia para decirle “tu hermana te tiene envidia, por eso se está inventando todo esto”. Juanz es el cuñado de Israel Benítez, el subdirector de Calidad para el Deporte de la Conade que fue suspendido por la Secretaría de la Función Pública por el mal manejo de recursos públicos. Poco después de lo ocurrido con la menor, fue separado de su cargo por otras razones.

Guanche, un cubano consentido

El entrenador en jefe del equipo de halterofilia del Indereq, Saúl González, dijo a Proceso que con la llegada de Iridia Salazar al instituto en febrero de 2023 la titular de Calidad para el Deporte, Carolina Acosta Álvarez, le pidió una lista de lo que necesitaban para tener buenos resultados en esta disciplina. Le recomendó a cinco entrenadores adscritos a la federación, de los cuales elegirían a uno para que trabajara con él.

Para su sorpresa le informaron que Ignacio Guanche fue el elegido, pese a no estar en la lista de los propuestos. Días después el entrenador cubano se integró al Indereq y Acosta Álvarez le exigió a González que le asignara a algunos de sus alumnos.

“La verdad seré muy honesto: la situación aquí en el Indereq no es muy buena, entonces no sé qué repercusiones tendré, pero es lo más ético que puedo hacer. El gimnasio parece trinchera de guerra, el señor Guanche llegó a dividir el equipo. Nosotros teníamos un equilibrio y ahora hay dos bandos donde los deportistas no se hablan, están los que apoyan a la niña y quienes lo defienden a él. Guanche no entrega ningún tipo de plan deportivo ni resultados, como no sabe usar la computadora le contrataron una secretaria”, explica González.

El equipo de halterofilia del Indereq está conformado por alrededor de 55 deportistas, de las cuales 30 son mujeres.

En octubre de 2023, Proceso publicó una serie de reportajes denominados “Terror en Querétaro: el depredador sexual de niñas deportistas”, donde se recabaron testimonios de un grupo de víctimas que fueron agredidas sexual, psicológica, emocional y físicamente por el entrenador de atletismo Andrés Guzmán Bustos, empleado del Indereq.

Ante esta situación, Iridia Salazar no les proporcionó ningún tipo de ayuda a las víctimas ni el acompañamiento humano y legal. Se mostró fría e indiferente.

La falta de empatía de la medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 ha provocado varias manifestaciones públicas y en redes sociales, una de ellas se realizó el 8 de marzo con motivo del Día Internacional de la Mujer, cuando integrantes de algunos contingentes protestaron con pancartas en contra de Iridia Salazar: “Indereq, manchado por el acoso y abuso sexual y por la incompetencia, omisión e ineptitud de su directora”.

La reportera buscó a Salazar para una entrevista, sin embargo, su respuesta fue escueta: “No tengo ninguna denuncia”. Y también se excusó de atender la entrevista por falta de tiempo. La reportera contactó al entrenador Guanche Amador a través de mensajes vía WhatsApp y tampoco hubo respuesta.

Una de las madres de familia de nombre Wanda Juárez se comunicó por teléfono con la reportera para abogar por el entrenador, alegando que al ser cubano “no entiende muy bien algunas cosas” y aseguró que el entrenador sí aceptaría la entrevista, pero no se volvió a comunicar.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: KARLA CABRAL FLORES.

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