viernes, 27 de octubre de 2023

Otis devastó colonias y comunidades en Guerrero; hay desesperación por falta de información oficial

A 36 horas del impacto del huracán Otis en Acapulco, gran parte del estado de  Guerrero sigue sin luz, agua potable y señal de teléfono e internet. Ante la falta de información oficial, miles de personas de todo México se han agrupado en grupos de Whatsapp por colonias y fraccionamientos en búsqueda de información sobre sus familiares.

En estos grupos creados en el transcurso de ayer, lo primero que se nota es la desesperación y la incertidumbre de las personas por no saber nada de sus familias, sentimientos que han empeorado con el anuncio de que van 27 personas fallecidas y hay por lo menos 4 personas desaparecidas, como informó la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodríguez. Al no existir una lista con los nombres de las personas que lamentablemente perdieron la vida, quienes tienen familia en Acapulco dicen que es imposible mantener la calma.

El puerto de Acapulco se encuentra en una situación de emergencia, pero poblados cercanos como Xaltianguis también piden ser atendidos. Debido a que la ayuda se ha concentrado en el puerto y que la ayuda de la Sedena aún no les ha llegado, pobladores de esta comunidad bloquearon un tramo de la carretera libre a Acapulco, en demanda de ayuda para las cerca de 4 mil personas damnificadas.

El huracán Otis pasó de ser una simple tormenta a un monstruo en tiempo récord, y los científicos pasan apuros para comprender cómo, y por qué, no lo vieron venir. “Lo que sucedió con Otis fue simplemente una locura”, dijo Brian McNoldy, investigador de huracanes de la Universidad de Miami, en entrevista con AP.

McNoldy dijo que podría haber un ingrediente misterioso que los científicos desconocen en este momento, pero aseguró que la temperatura del agua desempeña un papel clave. Las aguas cálidas son combustible para los huracanes. Y las aguas cálidas y profundas son como un festín ilimitado.

Sin embargo, los expertos apuntan a la falta de datos sobre la tormenta y sus alrededores, y a que simplemente no se comprende del todo qué es lo que hace que una tormenta actúe como si consumiera esteroides. El desarrollo explosivo del huracán Otis coincide con una tendencia documentada de ciclones que se intensifican rápidamente con más frecuencia en las últimas décadas debido a las mayores temperaturas del agua relacionadas con el cambio climático.

FUENTE: DESINFORMÉMONOS/EDUCA OAXACA.

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