martes, 10 de mayo de 2022

AMLO descarta replantear el diseño del espacio aéreo: "No hay, así lo sostengo, ningún problema"

El presidente desestimó las declaraciones públicas del subsecretario de Comunicaciones y Transportes, Rogelio Jiménez Pons, quien anunció que el gobierno de México estaba preparando un decreto presidencial para obligar a las aerolíneas cambiar sus operaciones del AICM al AIFA.

El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que su gobierno no pretende rediseñar el espacio aéreo en la Ciudad de México, dijo que esto es un invento de sus adversarios y la prensa conservadora en especial, el periódico Reforma y exigió a dueños de empresas de aviación que se pongan de acuerdo con las autoridades federales porque no se va a permitir que se afecte “el interés publico”.
“Los dueños de ese periódico (Reforma), están entregados por entero a la mentira, es el boletín de los conservadores de México, no hay, así lo sostengo, categóricamente ningún problema de rediseño en el manejo del espacio aéreo”, sostuvo.
Incluso, atribuyó la postura de sus oponentes políticos a la cancelación del proyecto fallido del aeropuerto en el lago de Texcoco porque, dijo, “se quedaron con las ganas” de convertir las 600 hectáreas del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), en un negocio inmobiliario. 

“Por eso se quedaron enojadísimos y ahora vuelven con lo del rediseño del espacio aéreos; que se vayan con su cuento a otro lado con todo respeto y acerca de las diferencias que se han presentado últimamente ya las estamos atendiendo y es lo mismo”, indicó en su conferencia mañanera.

Al respecto, el mandatario comentó que en el caso del AICM y la saturación de vuelos, existen grupos que se resisten a los cambios.

“Aprovecho para decirles que se pongan de acuerdo porque no se va a permitir que se afecte el interés público y ya Gobernación está teniendo reuniones con las empresas de aviación que han hecho el compromiso de migrar al nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA)”, expresó. 

Incluso, López Obrador desestimó las declaraciones públicas del subsecretario de Comunicaciones y Transportes, Rogelio Jiménez Pons, quien anunció que el gobierno de México estaba preparando un decreto presidencial para obligar a las aerolíneas cambiar sus operaciones del AICM al AIFA.
“Los decretos los firmo yo, me hubiesen preguntado, yo no sabía del anuncio de (Rogelio) Jiménez Pons”, dijo. 
“El rediseño del espacio aéreo es una maniobra de estos corruptos que son técnicos muy echados a perder”, señaló en referencia a sus adversarios.

Además, justificó el hecho de que las reuniones para ordenar el espacio aéreo de la ciudad de México se realicen en la Secretaría de Gobernación (Segob).

Por ello, agradeció a las empresas como Aeroméxico, Viva Aerobús y Volaris que de forma voluntaria aceptaron aumentar el número de viajes en el AIFA para despresurizar el AICM.
“La política se inventó para poner orden, para evitar la confrontación y para llegar a acuerdos porque además había mucha promiscuidad política”, aseveró.
Como ejemplo de la promiscuidad política, mencionó el caso de los expresidentes Ernesto Zedillo Ponce de León y Felipe Calderón Hinojosa que al término de sus periodos, fueron contratados por empresas privadas que se beneficiaron con la privatización de los ferrocarriles y el sector eléctrico en México y recibieron contratos millonarios como Iberdrola.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: EZEQUIEL FLORES CONTRERAS.

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