FUENTE: PROCESO.
MÉXICO, D.F. (apro).- Amnistía Internacional (AI) aseguró que la visita del presidente de Estados Unidos a México es “una oportunidad única” para que Barack Obama y Enrique Peña Nieto aborden de manera seria el tema de las violaciones a los derechos humanos que se cometen en ambos países.
El respeto a los derechos “humanos debe ser parte integral de todo plan conjunto para una mayor cooperación bilateral y no solamente palabras que se dicen frente a las cámaras”. Ambos presidentes deben tomar en serio la responsabilidad compartida de proteger los derechos de las personas. No deben desperdiciar esta oportunidad”, puntualiza el director ejecutivo interno de AI en Estados Unidos, Frank Jannuzi.
En una carta, advierte que en México continúan los reportes de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones y tortura cometidos por las fuerzas de seguridad y de la policía.
Sólo se han investigado unas pocas de las 7 mil denuncias oficiales de derechos humanos contra personal militar desde 2006, explica.
El presidente Peña Nieto, añade, se ha comprometido a poner fin a los abusos, pero hasta ahora ha hecho muy poco para detenerlos o para llevar a los culpables hasta la justicia.
En tanto, apunta, el gobierno de Estados Unidos mantiene su apoyo ilimitado a través de la Iniciativa Mérida y ha fallado en reportar con veracidad las graves violaciones de derechos humanos, así como en promover las medidas correctivas que plantea la propia iniciativa.
En su carta, AI plantea las preocupaciones y las recomendaciones que ha emitido sobre las violaciones a los derechos humanos y detalla que en los últimos años ha documentado una serie de abusos en contra de las personas, en los cuales la impunidad es la norma en la mayoría de los casos.
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