Los familiares recordaron que Teodulfo Torres «El tío» fue desaparecido el 23 de marzo de 2013 en la Ciudad de México, cuando debía presentarse en la Procuraduría General de la República (PGR) para declarar sobre la violencia policial del 1 de diciembre de 2012 en el Palacio Legislativo, durante la toma de protesta de Enrique Peña Nieto.
«Nos preocupan los pactos de impunidad vigentes, pues percibimos que, a pesar de las evidencias en la investigación, para el sistema de justicia las fuerzas armadas son intocables, porque las autoridades civiles en la práctica se achican y resulta casi imposible su investigación y posible enjuiciamiento», destacaron.
Los familiares acusaron que la pandemia obstaculizó aún más el acceso a la justicia y la verdad para el caso, pues la Fiscalía General de la República (FGR) dividió la investigación y los funcionarios realizan la búsqueda «desde la comodidad de su casa de manera remota vía streaming».
Si bien fueron recibidos por el subsecretario de derechos humanos, Alejandro Encinas Rodríguez, en junio de 2019, «a los funcionarios que delegó el seguimiento del mismo, hasta el día de hoy, no volvimos a saber de ellos», indicaron.
A pesar de la omisión de las autoridades, los familiares y amigos de Teodulfo Torres «El tío» aseguraron que siguen «de pie y resueltos como en el primer día» para acceder a la justicia.
El 1 de diciembre de 2012, durante la toma de protesta de Enrique Peña Nieto, agentes de la policía federal y el Estado Mayor presidencial reprimieron a los manifestantes que protestaban contra el nuevo mandatario. Entre las víctimas de la violencia se encontró Juan Francisco KuyKendall, activista y amigo que acompañó a Teodulfo en la protesta. “’El Tío’ lo vio todo, pues estaba a un lado, filmó con precisión el lugar de donde salió el proyectil y, como pudo, recogió dos cilindros de gas lacrimógeno que son prueba irrefutable de que la policía federal estaba usando ese tipo de armas ilegales para reprimir a los manifestantes», explicó Mónica Torres, hermana de Teodulfo.
La PGR citó a Teodulfo a declarar y entregar la evidencia el 21 marzo de 2013, con cinco días hábiles para presentarse, pero desde el día 23 de ese mes se desconoció el paradero del activista.
El comunicado completo:
8 años de Impunidad, 2 años de discursos y 1 año de Pandemia
Teodulfo Torres Soriano “El Tío”, activista adherente a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona, fue desaparecido de manera forzada por Agentes del Estado Mexicano, ahora mañosamente nombrados “Servidores de la Nación” y en la Ley General en materia de desaparición forzada de personas, desaparición cometida por particulares y del sistema nacional de búsqueda de personas, denominados “Servidores Públicos” algunos de ellos interesados en la impunidad han convertido a México en un país de Familiares, compañeros y amigos que después de sufrir graves violaciones a los Derechos Humanos, con el dolor hecho rabia, tenemos que enfrentar aparatos de justicia criminal que en un 90% de los casos, visten por uniforme la impunidad y como estándar la indolencia, cuando no el perverso cinismo. Pero la narrativa matutina pone distancia del horror para no mirarse en el espejo o en una diapositiva.
Demandar Verdad y Justicia es rescatar la memoria de las víctimas de aquel 1DMx en 2012 cuando Teodulfo “El Tío” acompañado por Juan Francisco “Kuy” ejerciendo un derecho constitucional fundamental fueron violentados por las “fuerzas armadas” (término excluido también de la ley en la materia), concretamente por la Policía Federal y el Estado Mayor Presidencial, acciones que tuvieron como consecuencia la ejecución extrajudicial de Kuy y la desaparición forzada de “El Tío”. Ambas corporaciones luego de su extinción fueron rescatadas por el actual régimen e incorporadas en la Guardia Nacional. Ahora, para los que defendemos derechos nos preocupan los pactos de impunidad vigentes, pues percibimos que, a pesar de las evidencias en la investigación, para el sistema de justicia las fuerzas armadas son intocables, porque las autoridades civiles en la práctica se achican y resulta casi imposible su investigación y posible enjuiciamiento como en el caso que nos ocupa o como en los casos Cienfuegos o Ayotzinapa.
Si bien es cierto que en junio de 2019 fuimos recibidos por el subsecretario de derechos humanos, población y migración Alejandro Encinas Rodríguez, quien empeñó su palabra en la solución del caso, también es cierto que a los funcionarios que delegó el seguimiento del mismo, hasta el día de hoy, no volvimos a saber de ellos. Después llegó la pandemia y a la Fiscalía General de la República, a esa sí, le cayó como anillo al dedo. Porque a partir de entonces la investigación y la búsqueda (que también fueron separadas en la ley) la realizan los funcionarios desde la comodidad de su casa de manera remota vía streaming.
Comunicado: de pie y resueltos como en el primer día.
¡Presentación con vida de Teodulfo Torres Soriano “El Tío”!
¡Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos!
Luchamos por el miedo a morir la muerte del olvido.
Familiares, compañeros y amigos de “El Tío”
AUTOR: REDACCIÓN.
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