viernes, 8 de noviembre de 2013

Recursos para instituciones de educación superior ni dádiva ni caridad: Anuies

FUENTE: LA JORNADA.
AUTOR: Emir Olivares Alonso.

Se trata de un elemento indispensable para que las casas de estudio puedan alcanzar objetivos como la ampliación de la cobertura, de la calidad, de programas académicos sólidos, entre otros.

San Luis Potosí, SLP. Los recursos presupuestales para las instituciones públicas de educación superior "no representan dádiva alguna ni un acto de caridad". Se trata de un elemento indispensable para que las casas de estudio puedan alcanzar objetivos como la ampliación de la cobertura, de la calidad, de programas académicos sólidos, habilitación de profesores, acreditación de los programas educativos, fortalecimiento de la vinculación, la mejora del cuerpo académico y de la investigación, entre otros.

Así lo subrayó el secretario general ejecutivo de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (Anuies), Enrique Fernández Fasshnacht, quien agregó que la "inversión pública en educación superior debería formar parte de una política de Estado comprometida con la consolidación de la sociedad del conocimiento en México y con la garantía del más importante de los derechos humanos: el de la educación, que permite a los ciudadanos ejercer en forma eficaz y crítica el resto de sus derechos".

Al inaugurar la 41 sesión ordinaria del Consejo de Universidades Públicas e Instituciones Afines de la Anuies, que se celebra en esta ciudad y donde rectores y representantes de más de 70 casas de estudios analizarán y discutirán el proyecto de presupuesto para 2014 planteado por el Ejecutivo federal para la educación superior, Fernández Fasshnacht sostuvo que los recursos son indispensables para alcanzar la meta que se ha planteado el gobierno federal de cerrar el sexenio con una cobertura de 40 por ciento en este nivel.

Por ello, confió que la Cámara de Diputados atenderá las peticiones de los rectores para no sólo aprobar el monto que e Ejecutivo federal propone como presupuesto para el próximo año para el sector (cerca de 180 mil millones de pesos), sino que los fondos se incrementen.

"Estoy seguro que los señores diputados recibieron con profunda sensibilidad este mensaje y que atenderán nuestras peticiones. No obstante, debemos seguir impulsando este frente común que hemos conformado desde hace varios años para evitar que la educación superior pública de nuestro país enfrente situaciones de alto riesgo para el cumplimiento de su misión."

El titular de la Anuies resaltó además la importancia de romper el "desfasamiento" entre la planeación que llevan a cabo las instituciones públicas de educación superior y el financiamiento anual que reciben, "que genera incertidumbre de que la planeación de mediano plazo tenga los recursos necesarios para su realización. Es por ello que se requiere de una estrategia plurianual de financiamiento, que se acompañe del compromiso, ya probado de parte de nuestras instituciones, con la transparencia y la rendición de cuentas, la que seguramente nos permitirá alcanzar las metas de cobertura y calidad que nos hemos planteado y otras más ambiciosas".

A esta sesión del Cupia asiste el subsecretario de Educación Superior de la SEP, Fernando Serrano Migallón, quien indicó que de las reformas estructurales planteadas por el titular del Ejecutivo federal, Enrique Peña Nieto, la educativa es la que más tiempo tomará para ver los resultados.

"La reforma estructural educativa, que si bien es verdad esta enfocada en este primer paso en la educación básica y se han llevado los dos primeros pasos mas importantes la reforma constitucional y las leyes secundarias, tiene que culminar obligatoriamente en la educación superior. A diferencia de las otras reformas estructurales, ésta es una reforma que lleva mucho más tiempo para poder contemplar los beneficios que a la larga va a traer la reforma educativa".

El funcionario federal planteó que el enfoque debe darse en tres áreas: la cobertura, para cumplir con la oferta del 40 por ciento al final del sexenio; la calidad en la formación; y que las universidades mantengan su compromiso y función social.

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