AUTOR: MARCELA TURATI.
MÉXICO, D.F., (apro).- Margarita López recibió hoy los restos de su hija Yahaira Guadalupe Bahena, a quien buscó por dos años, dos meses y 20 días, luego de que fue secuestrada, asesinada y enterrada por Los Zetas en Oaxaca, en complicidad con autoridades estatales.
Antes de trasladar los restos de Yahaira a Lázaro Cárdenas, Michoacán, donde serán enterrados mañana, López dijo en entrevista: “Mañana voy a cerrar ese círculo de peregrinar por mi niña para que pueda descansar, quizás no en paz, pero que pueda por lo menos decir que sé dónde está. Porque mi niña me grita: Justicia, que su crimen no quede así, que su asesinato no quede impune”.
Margarita López es un icono entre las madres que buscan a sus hijas desaparecidas. A partir de la desaparición de la suya se convirtió en investigadora, gastó millones de pesos en informantes, se introdujo a cuarteles militares, recorrió morgues, revisó pilas de cadáveres, encaró a criminales dentro de las cárceles, descubrió casas de trata y corrupción del gobierno, se unió al Movimiento por la Paz, marchó por todo México y por Estados Unidos, hizo dos huelgas de hambre, sufrió un “levantón”, se salvó de un atentado, y encaró a dos presidentes y a sus gabinetes con la exigencia de que localizaran a Yahaira.

