AUTOR: JESUSA CERVANTES.
MÉXICO, D.F. (apro).- El gobierno federal asumirá como deuda “entre 650 y 700 mil millones de pesos” de los pasivos laborales de Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE), y no su totalidad, que alcanza un billón 650 mil millones.
Lo anterior, como parte de la reforma energética y que tiene como objetivo hacer más competitivas a ambas empresas.
El diputado Marco Antonio Bernal, presidente de la Comisión de Energía, dijo que no se trata de ningún “rescate”, como lo llamó la oposición e incluso calificara la maniobra como el Pemexproa o Fobamex, en alusión al Fobaproa, a través del cual se rescató a los bancos quebrados en 1995.
El priista aseguró que dicho pasivo laboral no lo pagarán los mexicanos, debido a “que no se están comprometiendo recursos fiscales en el planteamiento que estamos haciendo. No hay manera, no habrá una transferencia de recursos del gobierno federal para allá, ni tampoco un sacrificio fiscal en esos términos”.