El caso #LadyProfeco aparentemente ha concluido: la Procuraduría Federal del Consumidor retiró los sellos de suspensión del restaurante Máximo Bistrot y aclaró que jamás llevó a cabo ninguna clausura y que el local permaneció cerrado por decisión de sus propietarios.
En un comunicado, el organismo aclaró que jamás llevó a cabo ninguna clausura y que el local permaneció cerrado por decisión de sus propietarios.
La dependencia dio a conocer que al momento de la verificación se constató que el establecimiento presta el servicio de restaurante con la modalidad o sistema de reservación, “sin informar al consumidor por ningún medio o forma las políticas y mecanismos aplicables para ello, principalmente en la asignación de mesas” (primer rubro que fue suspendido por la Profeco).