AUTOR: PARIS MARTÍNEZ.
Luego de ser perseguidas por un grupo de hombres armados en pleno Centro de la Ciudad de México, y tras sortear distintos obstáculos impuestos por la PGR, este domingo un equipo de antropólogas expertas en reconocimiento de cadáveres, proveniente de Argentina, pudo tomar muestras del cuerpo que –sin realizar prueba alguna– las autoridades de Oaxaca presentaron hace más de un año como el de Yahaira Guadalupe Bahena, una joven de 19 años raptada en abril de 2011.
“Mi hija fue extraída del interior de su casa, en Oaxaca –explica Margarita López, una de las tres madres de desaparecidos que en octubre pasado realizaron una huelga de hambre de siete días ante la Secretaría de Gobernación–, en donde se encontraba radicando porque es esposa de un soldado, destacamentado en ese entonces en el municipio de Tlacolula de Matamoros… viviendo ahí, un comandante de la Policía Ministerial coludido con Los Zetas la señaló como posible enviada de La Familia, sólo por ser michoacana, y el capo local ordenó levantarla.”