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Reformas en seguridad crean “superaparato de vigilancia” y sin control ciudadano: alerta la ONG R3D

Las nuevas reformas impulsadas por la presidenta Claudia Sheinbaum otorgan al Ejército y a Seguridad y Protección Ciudadana facultades de vigilancia masiva con escasa supervisión. La R3D advierte sobre riesgos de espionaje, abusos y militarización de la seguridad.

El paquete de reformas en materia de seguridad, inteligencia y de telecomunicaciones elaboradas por la Presidencia otorga nuevas facultades al secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, y al aparato militar, que conforman un “superaparato de vigilancia” sobre el cual la ciudadanía tendrá poca o nula supervisión, advierte José Flores, el director de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D).

“Es urgente una reforma a la vigilancia”, insiste el activista en entrevista con Proceso, en la cual señala que las reformas crean nuevas bases de datos interconectadas que darán “más facultades y menos controles a las autoridades para monitorear y vigilar a las personas”.

Además de sellar su incorporación al aparato militar, las reformas a la Guardia Nacional otorgan alcuerpo castrense la facultad de recolectar datos telefónicos –la localización o los registros de llamadas, mas no los contenidos de las mismas– sin pedir la autorización de un juez de control, lo que abre la puerta a abusos, según Flores, quien recuerda cómo en 2023 las fiscalías de la Ciudad de México y de Colima ordenaron a las compañías telefónicas a entregarles información telefónica de opositores políticos.

Flores destaca otros aspectos delicados de la reforma a la Guardia Nacional, como la posibilidad para sus integrantes de pedir licencia para competir en elecciones –facultad que ya tienen los militares–, o el permiso de realizar operaciones encubiertas, con los riesgos de tortura y otras “externalidades” que esto conlleva.
Los militares ya están en las calles, han concentrado poder a lo largo de los últimos años, ya no sólo como con grandes proyectos de infraestructura, sino con capacidades de elección popular, o sea se ve cómo México transita lenta e inexorablemente hacia un régimen híbrido entre civil y militar.
De hecho, Flores señala que, al margen de la reforma a la Guardia Nacional, el equipo de Sheinbaum modificó el artículo 29 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, con lo que autorizó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) procesar y usar información en actividades de inteligencia por motivos de seguridad nacional; en otras palabras, dio facultades al Ejército para recolectar inteligencia bajo una interpretación amplia del concepto de seguridad nacional.

La situación no es nueva: por lo menos desde 2010 la Sedena ha tenido el spyware Pegasus, y lo ha utilizado para intervenir teléfonos de manera ilegal, pues nunca ha contado con las facultades para hacerlo, y nunca ha solicitado una orden judicial para infectar los dispositivos de sus víctimas. Sin embargo, con el cambio a la ley, Flores asevera que “ahora básicamente les están abriendo la puerta para que lo hagan con este sustento”.

De paso, el director de R3D recuerda que la Sedena sigue desacatando una orden del extinto Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), que le instruyó dar a conocer los contratos mediante los cuales adquirió Pegasus. Por ello, considera que con las nuevas reformas “habrá más impunidad” y menos rendición de cuentas, pues “se están aflojando los pocos controles que existían”.

Información ¿para EU?
   
Flores también destaca que las reformas obligarían a presentar la CURP biométrica para realizar trámites públicas o privados y amplían las facultades del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), incluyendo un mayor acceso a bases de datos como una nueva plataforma única de identidad, creada “con la finalidad de la búsqueda de personas desaparecidas o no localizadas”.

El activista señala que Omar García Harfuch tendrá la facultad de suscribir convenios con instancias nacionales e internacionales, una posibilidad “especialmente grave” en un contexto en el que el gobierno estadunidense de Donald Trump ha pedido a México el acceso a la información biométrica de los viajeros y algunos de los ciudadanos en tránsito, como lo ha hecho con los datos biométricos que se registran en los centros del Instituto Nacional de Migración (INM).

Respecto de los datos telefónicos, Flores aclara que el gobierno y la mayoría legislativa de Morena quitaron el polémico registro nacional de usuarios de telefonía móvil, pero “todo parece indicar” que las autoridades dejarán a las empresas telefónicas la responsabilidad de solicitar los datos de sus clientes y las obligarán a compartirlas bajo ciertas circunstancias.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: MATHIEU TOURLIERE.

Y con la censura… viene la vigilancia

Esto no es una exageración. La justificación siempre es la misma: seguridad. Pero seguridad sin libertades no es protección, es represión. Lo que se presenta como una medida técnica contra el crimen organizado está redibujando el mapa del poder en México. Se entregan herramientas de vigilancia y operación a los militares, no para proteger a la ciudadanía, sino para vigilarla.

En México se está construyendo un nuevo régimen con más vigilancia, más poder militar, más censura. Este proceso no ha ocurrido de golpe, sino a través de una secuencia calculada de reformas legales, decisiones judiciales y maniobras políticas que, en conjunto, están desmontando el sistema democrático desde dentro.

El martes y miércoles pasados, la Cámara de Diputados aprobó un paquete legislativo profundamente alarmante. Entre las reformas más graves están las modificaciones a la Ley de la Guardia Nacional, la Ley de Seguridad Nacional, la Ley del Sistema Nacional de Seguridad Pública, Ley del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia en Materia de Seguridad Pública y otras normas clave que regulan la inteligencia civil y militar.

Con estas reformas, se legaliza la vigilancia estatal sin necesidad de control judicial, abriendo la puerta a que el Ejército y otras autoridades realicen tareas de inteligencia en secreto, sin autorización de un Juez, sin notificación a la persona afectada y sin mecanismo alguno de supervisión externa. Asimismo pone a disposición de las autoridades todos nuestros datos resguardados por las instancias públicas, y obliga a los sujetos privados a facilitarlos.

Estas leyes no sólo vulneran derechos fundamentales como la privacidad y la presunción de inocencia. También contradicen criterios constitucionales y de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Se rompe, de manera abierta, con los principios del debido proceso y se normaliza el uso del aparato estatal para espiar, controlar y silenciar.

Pero esto va más allá del espionaje. Lo que se está consolidando es un modelo de país en el que las Fuerzas Armadas no sólo vigilan sino también construyen, administran, controlan y deciden sobre bienes públicos. Hoy el Ejército gestiona aeropuertos, aduanas, obras públicas y tareas de seguridad civil. Ahora se le otorga capacidad operativa como agencia de inteligencia. La militarización ya no es un proceso oculto, sino una política de Estado declarada.

Este poder, cerrado por naturaleza y ajeno al escrutinio civil, se coloca ahora en el centro del aparato gubernamental. Sin auditorías, ni contrapesos, ni transparencia. En los hechos, se está construyendo un poder paralelo con inmunidad total.

Mientras el poder militar y la vigilancia se expanden, la crítica es asediada. Ya denunciamos en la columna de la semana pasada cómo en Puebla y Campeche se legaliza la censura y se castiga a quienes disienten. A nivel federal, el INE y el Tribunal Electoral emiten resoluciones que terminan censurando opiniones ciudadanas, especialmente durante los procesos electorales, bajo una mala utilización e interpretación de la violencia política contra las mujeres en razón de género. 

Así se construye un régimen de control. Por un lado, censura legalizada; por el otro, vigilancia sin freno. Al fondo, un poder militar que no le rinde cuentas a nadie y un régimen político sin contrapesos.

Esto no es una exageración. La justificación siempre es la misma: seguridad. Pero seguridad sin libertades no es protección, es represión. Lo que se presenta como una medida técnica contra el crimen organizado está redibujando el mapa del poder en México. Se entregan herramientas de vigilancia y operación a los militares, no para proteger a la ciudadanía, sino para vigilarla. ¿O cuáles han sido los resultados positivos en los últimos quince años en materia de seguridad por la compra y uso indiscriminado de softwares espía, como Pegasus?

El peligro no es hipotético. Ya lo estamos viviendo. El periodismo crítico ha sido espiado, y desacreditado. Hay agresiones físicas, campañas de desprestigio y procesos judiciales amañados. Los tribunales —capturados políticamente— reducirán el margen para disentir sin represalias. Con las nuevas reformas, cualquier voz incómoda puede ser clasificada como amenaza a la “seguridad nacional” y ser espiada. O para no ir lejos, puede considerarse como “ofensiva” o “insultante” para castigarla.

Este modelo nos afecta a todas las personas, no sólo a periodistas o activistas. A quienes no se afecta, en un Estado infiltrado por la criminalidad organizada, es a quienes se supone que realmente deben ser investigados y enjuiciados. Se coarta el derecho a expresarse, a informarse, a exigir cuentas. Afecta la privacidad, la intimidad y, sobre todo, el derecho a no ser tratado como enemigo por ejercer ciudadanía democrática.

No es alarmismo. Estamos atestiguando una mezcla peligrosa de censura institucional, vigilancia militar y concentración del poder. El momento exige todo lo contrario a lo que este proyecto político hegemónico pretende. Más vigilancia ciudadana sobre las autoridades, no más vigilancia de las autoridades sobre la ciudadanía. Más debate, más transparencia, más control civil sobre el poder armado.

Porque una vez que la censura se vuelve oficial, la vigilancia masiva se legaliza y el Ejército se convierte en árbitro de todo, ya no hay camino fácil de regreso.

FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: LEOPOLDO MALDONADO.

Diputados de la 4T aprueban ley de Inteligencia; viola el derecho a la privacidad: oposición

Con esta reforma el gobierno tendrá acceso a datos de geolocalización, biométricos, cuentas de banco e incluso conversaciones telefónicas, acusa el PAN.

Los diputados oficialistas aprobaron el dictamen de la Ley del Sistema Nacional de Investigación de Seguridad Pública que tiene como objeto establecer los fines y regular la integración, el funcionamiento y la operación del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia en Materia de Seguridad Pública.

La reforma fue aprobada en lo general por 368 votos a favor y 102 en contra por parte del PRI y del PAN.

La minuta fija que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) será adscrito a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) para tareas de investigación. También establece que el CNI podrá acceder irrestricta y directamente o a través de la Plataforma a toda la información que integre, almacene, genere, recopile, sistematice o procese la Secretaría de Gobernación mediante la Plataforma Única de Identidad (PUI).

Asimismo, en el artículo 12 fracción III se establece que la SSPC podrá solicitar a las instituciones de seguridad pública, entes públicos y a entes privados el envío de información contenida en cualquier registro administrativo que contenga datos vehiculares y de placas.

También de datos biométricos y telefónicos, registros públicos de la propiedad y del comercio, registros de personas morales, catastros, registros fiscales, registros de armas de fuego, registros de armas de fuego aseguradas o decomisadas.

Además, la SSPC podrá solicitar registros de comercio, registros de personas prestadoras de servicios de seguridad privada, registros de padrones de personas detenidas y sentenciadas, registros de servicios financieros, bancarios, de transporte, salud, telecomunicaciones, empresariales y comerciales, registros en materia marítima y todos aquellos de los que puedan extraer indicios, datos e información para la generación de productos de inteligencia.

La reforma se prevé sea discutida en el pleno del Senado el próximo lunes 30 de junio, dos días antes de que termine el periodo extraordinario en el Congreso.

OPOSICIÓN ACUSA QUE CON LA REFORMA SE VIOLA EL DERECHO A LA PRIVACIDAD

A inicio de la discusión, se presentaron tres mociones suspensivas por parte de Movimiento Ciudadano (MC), PAN y PRI. Todas fueron desechadas en votación económica por parte de los legisladores oficialistas.

El diputado del PAN, José Alfonso Rubalcaba, afirmó que los dictámenes a discusión en materia de seguridad no sólo no abonan a resolver el problema, sino que además representan una amenaza directa al derecho a la privacidad de los ciudadanos.

“No es menor la atrocidad que están intentando aprobar. Si esto se aprueba, van a tener el poder para acceder a toda la información, incluyendo geolocalización, datos biométricos, cuentas de banco, incluso conversaciones telefónicas, fotos y videos personales de todas las personas que utilicen un celular.

“Eso es a todas luces inconstitucional, ya que viola el principio básico que dice nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino a través de un mandamiento judicial”, enfatizó.

Por su parte, el diputado del PRI, Emilio Lara, afirmó que con la reforma se estaría sacrificando el derecho a la privacidad para recuperar el derecho a la paz y la seguridad, pero enfatizó que se perderán los dos.

“Esto es vigilancia masiva. Una violación al artículo 6 y al artículo 16 de la Constitución. Un control absoluto, sin filtros judiciales, sin contrapesos y sin transparencia que busca clasificar de manera indefinida el espionaje con la excusa de que es un asunto de seguridad nacional”, resaltó.

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: JUAN CARLOS CORTÉS.

México legaliza un sistema de vigilancia masiva sin precedentes: Luis Fernando García

El abogado Luis Fernando García, cofundador y exdirector de la organización R3D, advirtió en 'Aristegui en Vivo' que se trata de un sistema de vigilancia 'propio de un régimen autoritario'.

Luis Fernando García, cofundador y exdirector de la organización R3D (Red en Defensa de los Derechos Digitales), alertó sobre la consolidación de un sistema de vigilancia masiva sin precedentes en México, tras la reciente aprobación de las leyes de Ley de Investigación e Inteligencia y del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Durante una entrevista con Aristegui en Vivo, aseguró que las reformas aprobadas ponen en riesgo derechos fundamentales de la población.

Además de las leyes aprobadas, enfatizó que se trata de un entramado de reformas —entre ellas, la Ley de Telecomunicaciones, la Ley General de Población, y la legislación en materia de desaparición forzada— que en su conjunto permitirán el acceso en tiempo real a bases de datos públicas y privadas, sin control judicial.

“Se legaliza el espionaje militar que se ha llevado a cabo con ilegalidad todos estos años”, dijo,  y recordó la utilización del software espía Pegasus en contra de periodistas, personas defensoras de derechos humanos “con impunidad”.

García señaló que la Ley del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia en Materia de Seguridad Pública obliga a todo proveedor de servicios públicos y privados a compartir sus bases de datos, lo que implica que incluso acciones cotidianas como comprar un refresco o pedir un paquete en línea estarán vinculadas al registro oficial de la persona.

“Todo va a requerir que des tu CURP, y a través de ese elemento se va a poder cruzar toda la información. Toda la información va a estar agregada y disponible para autoridades en México, y el acceso a esa información no tiene ningún control absoluto”, apuntó.

Advirtió que el nuevo marco legal habilita a la Guardia Nacional, al Ejército, las fiscalías y el Centro Nacional de Inteligencia para tener acceso irrestricto y en tiempo real a esa información.

“Nunca te vas a enterar cuándo estén monitoreando tus datos. En realidad, es un sistema de vigilancia masivo propio de un régimen autoritario. Y suena muy escandaloso decirlo así, pero eso es lo que dicen las leyes”.


Para García, se trata de un “parteaguas histórico” que pone en riesgo la privacidad, el acceso a derechos y la no discriminación. Añadió que el sistema se está implementando en un contexto político especialmente preocupante, donde no existe una real división de poderes ni contrapesos.

“No hay división de poderes. El Poder Ejecutivo, Legislativo y ahora Judicial están concentrados en un mismo lugar […] No hay autoridad de protección de datos: la acaban de desaparecer. No hay órgano de transparencia, no es autónomo”.

Insistió en que quienes hoy callan o respaldan las reformas podrían lamentarlo en el futuro, incluyendo a simpatizantes del gobierno actual: “Este sistema, esta infraestructura digital autoritaria, va a estar disponible para cualquier gobierno en el futuro, incluyendo un gobierno de derecha, un gobierno con el que no simpaticen. Entonces, es una irresponsabilidad histórica tremenda”.

Asimismo, denunció la colaboración con el gobierno de Estados Unidos en materia de control migratorio y persecución de personas migrantes mexicanas, usando datos proporcionados por México.

“México parece dispuesto a entregar datos que quiere el gobierno de Estados Unidos para la persecución de personas mexicanas migrantes irregulares”.

En cuanto a la eliminación del Registro Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil de la iniciativa de Ley del Sistema Nacional de Seguridad Pública, consideró que se trata de un engaño, ya que está considerado en los proyectos de ley  aprobados y los que están por aprobarse. “El registro existe, lo hacen las empresas, todas las operadoras telefónicas, y las autoridades tienen acceso directo, en tiempo real, a toda la información”, dijo.

Por último, calificó de “traición” el uso político del dolor de las familias de personas desaparecidas, al referirse a la creación de la Plataforma Única de Identidad, inicialmente prometida solo para tareas de búsqueda, y ahora accesible por los servicios de inteligencia para cualquier fin.

“Ayer, de último minuto, agregaron a la Ley del Sistema de Seguridad e Inteligencia una modificación que dice que el Centro Nacional de Inteligencia va a tener acceso irrestricto a la Plataforma Única de Identidad, para cualquier fin”.

“Es verdaderamente un sistema de vigilancia masiva autoritario sin precedentes, que no existía, y que el gobierno va a usar todo tipo de trampas discursivas para intentar justificar”, concluyó.


FUENTE: ARISTEGUI NOTICIAS.
AUTOR: REDACCIÓN.

Reformas de “Guardia Nacional” legalizan el espionaje militar

Esta semana, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo envió a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión una iniciativa para expedir la Ley de la Guardia Nacional y reformar leyes secundarias en la materia. Estas reformas proponen legalizar la vigilancia de las comunicaciones por parte del Ejército, una práctica que hemos advertido y documentado ampliamente por sexenios- como lo revela la investigación Ejército Espía– y que se ha llevado a cabo ilegalmente en contra de periodistas, defensoras de derechos humanos, investigadoras e incluso funcionarios públicos con impunidad.

A través del artículo 29, fracciones XXI a XXIII de la Ley Orgánica de la Administración Pública General, esta reforma propone facultar a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) para procesar y usar información en actividades de inteligencia por motivos de seguridad nacional, sin que existan controles o salvaguardas para acotar estas atribuciones.

Adicionalmente, si bien la Ley de Guardia Nacional vigente no incluye salvaguardas suficientes en la realización de actividades de investigación e inteligencia, la reforma propuesta no sólo no las incorpora, sino que representa un retroceso a los controles existentes. Por ejemplo, el artículo 9 fracción XXVI de la redacción propuesta  genera confusión respecto de si la Guardia Nacional requiere autorización judicial para acceder a los datos conservados en manos de empresas de telecomunicaciones o para conocer la georreferenciación de los equipos de comunicación móvil en tiempo real.

Estas reformas son parte de un paquete de iniciativas presentadas ante el Congreso de la Unión que configuran -de manera individual y conjunta- un panorama peligroso para los derechos humanos. Por ejemplo, la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública y la Ley del Sistema Nacional de Investigación e Inteligencia en Materia de Seguridad Pública plantean la interconexión de bases de datos nacionales e internacionales tanto públicas como privadas sin los controles necesarios, así como la creación de una Plataforma Nacional de Telefonía Móvil. La Ley de Telecomunicaciones propone también este registro obligatorio de usuarios de telefonía y la obligación de las empresas de conservar y compartir datos, incluyendo la geolocalización en tiempo real. Además, las reformas a la Ley General de Población y a la Ley General en Materia Desaparición Forzada imponen la CURP biométrica como condición obligatoria para acceder a servicios públicos y privados y una Plataforma Única de Identidad para validar, monitorear y gestionar la identidad de todas las personas en México con consultas en tiempo real. 

El incremento de las facultades de vigilancia sin control para la SEDENA y el debilitamiento de controles para la Guardia Nacional planteadas en estas reformas, así como las propuestas legislativas mencionadas en el párrafo anterior son presentadas en un contexto de debilitamiento de disposiciones en materia de transparencia y datos personales. En esencia, esta legalización de la vigilancia de comunicaciones por parte del Ejército expone gravemente la intimidad de la población y plantea importantes riesgos a la protección de datos personales y los derechos humanos.

Esta reforma, aunque se presenta bajo el título “en materia de Guardia Nacional”, rebasa este ámbito y le da facultades de vigilancia sin controles al Ejército. Por ello, denunciamos enérgicamente ésta y las demás propuestas legislativas -promovidas por el Poder Ejecutivo Federal- que buscan ampliar la infraestructura tecnológica y las facultades de vigilancia estatal. Hacemos un llamado al Congreso de la Unión para desechar estas reformas en beneficio de la población mexicana y analizar este tipo de propuestas desde una perspectiva de derechos humanos enfocada en el establecimiento de controles democráticos a la vigilancia. 

De igual manera, hacemos un llamado a la resistencia a todas las personas comprometidas con los derechos humanos para visibilizar los intentos de legalización de la vigilancia de comunicaciones practicada por el Ejército. Es necesario seguir exigiendo transparencia, rendición de cuentas y garantías de no repetición ante las múltiples violaciones a los derechos humanos que implican estas prácticas intrusivas.

Firman

R3D: Red en Defensa de los Derechos Digitales

ARTICLE 19, Oficina para México y Centroamérica

Social TIC

FUENTE: RED EN DEFENSA DE LOS DERECHOS DIGITALES
AUTOR: RED EN DEFENSA DE LOS DERECHOS DIGITALES.
FECHA: 13 DE JUNIO DEL 2025.

FGE espía y oculta

La Fiscalía General del Estado (FGE) ha aceptado el uso de equipo de espionaje para investigaciones como intervenciones telefónicas y de geolocalización satelital, pero la reservó por cinco años.

El uso de equipo de espionaje y de información de inteligencia que puede resultar en la violación de Derechos Humanos, ponderando la investigación de delitos de alto impacto, se ubica en una línea muy delgada que sólo puede clarificarse por medio de la transparencia, el cuidado, los protocolos y la rendición de cuentas.

Pero todos estos conceptos -que no son ni remotamente actuales o modernos- son ajenos para la Fiscalía General del Estado (FGE), ente encargado de la investigación de delitos del fuero común, pero que bajo la flexible premisa de que debe proteger la secrecía la investigación, puede hacer lo que desea sin rendir cuenta alguna.

El autor de esta columna llevó a cabo una petición de acceso a la información con número 021381025000239, dirigida a la institución encabezada por María Elena Andrade Ramírez -hoy nombrada ya como “Fiscala”- que insiste en colocarse como una dependencia más del Poder Ejecutivo, aunque -en teoría- ya es independiente.

La respuesta de la FGE, a nombre del agente del Ministerio Público César Octavio Iribe Reyes, confirmó que la institución cuenta con el equipo de inteligencia para la intervención telefónica y para la geolocalización satelital de cualquier ciudadano que se pueda considerar probable responsable de un crimen.

Sin embargo, la institución refirió que no puede proporcionar el resto de la información solicitada. El único dato requerido era conocer sí durante el 2024 y 2025, la FGE utilizó este recurso para robustecer indagatorias y mencionar en cuántas ocasiones intervinieron teléfonos u obtuvieron datos satelitales de geolocalización. Es decir, números y datos que no influyen o afectan en expedientes específicos.

Sin embargo, argumentaron que la información solicitada debido a que hacer pública la diligencia de investigación pone en riesgo la misma, además de que alertará a los grupos delictivos que se encuentran bajo una indagatoria judicial.

Pero no tienen razón, porque la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) establece una sección específica para que las Fiscalías -obligadamente- brinden información relacionada con intervenciones telefónicas o de geolocalización que no pongan en riesgo el trabajo de la FGE.

Además, el autor de esta columna no solicitó datos específicos de las investigaciones, ni mucho menos si se trata de investigaciones activas o antecedentes de un expediente judicial.

No conformes con negar la información, la FGE definió un periodo de cinco años para reservar cualquier dato relacionado con el tema, sin justificar la necesidad de ocultar los datos por el plazo máximo permitido por la Ley.

Sí la “Fiscala” Andrade Ramírez, acepta que tiene equipo y mecanismos para espiar a la sociedad, es obligación del Estado informar y justificar las acciones que violan los Derechos Humanos de los ciudadanos.

¿Qué garantiza que la “Fiscala” u otro funcionario de la FGE no utiliza los equipos con otros fines? ¿Cuántas veces y en qué condiciones irrumpen en la privacidad de las personas para robustecer investigaciones o para fines políticos? ¿Qué pasa con la investigación que no es relevante? ¿Existe una cadena de custodia de esta información? ¿cómo se almacena?

Todos estos datos carecen de una respuesta y la FGE no tiene disposición de informar un acto que no es diferente a una intromisión de una propiedad, que sólo puede justificarse a través de una orden de cateo, una invasión a la privacidad también. Pero la FGE se siente más cómoda escondiendo sus acciones.

Sí no hay transparencia en estas acciones, es imposible dejar de considerar que el gobierno tiene carta abierta para cometer espionaje contra la ciudadanía.

FUENTE: SEMANARIO ZETA.
AUTOR: EDUARDO VILLA.

Trump alista una CIA más agresiva contra los cárteles mexicanos; espionaje y operaciones encubiertas

La agencia de inteligencia prevé aplicar contra las organizaciones criminales las lecciones aprendidas en la lucha antiterrorismo, una estrategia que –según sus críticos– desataría reacciones adversas, asegura la prensa en Estados Unidos.

Operaciones encubiertas y espionaje dentro de México para combatir, desmantelar y recopilar información sobre los cárteles mexicanos del narcotráfico, es parte integral de un plan prepara la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), reportan medios de comunicación de Estados Unidos.

“Contrarrestar a los cárteles en México y a nivel regional es una prioridad para la CIA como parte de los amplios esfuerzos del gobierno del presidente Donald Trump para acabar con la grave amenaza del narcotráfico. El director John Ratcliffe tiene la determinación de poner a trabajar a la experiencia exclusiva de la DEA en contra de este reto multifacético”, reporta en su primera plana el periódico The Washington Post, citando a un vocero de la CIA.
Bajo la condición del anonimato, distintos medios nacionales de comunicación, entre estos las cadenas de televisión CNN, MSNBC y el Post, reportaron detalles de la estrategia que llevaría a cabo la Agencia Central de Inteligencia (CIA).

“La CIA afila se concentración en los cárteles, riesgo de una reacción por parte de México, podría expandirse el intercambio de (información de) inteligencia y operaciones encubiertas”, tituló el Post a su nota.

El plan se concentra en que la CIA asuma un papel más relevante en la lucha contra los cárteles del narcotráfico, que como los señala Trump, son la principal amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos con el tráfico de drogas; en especial las manufacturadas con fentanilo.

Con una orden ejecutiva que firmó el pasado 20 de enero, el primer día de su segundo mandato presidencial, Trump designó a los cárteles del narcotráfico como organizaciones terroristas internacionales.

La semana pasada y cumpliendo este mandato de Trump, el general Gregory Guillot, informó públicamente al Congreso federal de su país que el Comando Norte que él dirige lleva a cabo “vuelos de inteligencia y reconocimiento” sin la autorización del gobierno de México en contra de los cárteles del narcotráfico.

“Los funcionarios de la CIA que hablaron con nosotros, informaron que se están ultimando los detalles de un plan que espiar dentro de México a los cárteles con drogas con capacidad tecnológica que para ello”, reportó por su parte la cadena de televisión CNN en la mañana de este martes.

The Washington Post, el primer medio de comunicación estadunidense en dar a conocer la información hace otro apartado: “divisiones de la CIA avalúan planes para compartir más información de inteligencia con gobiernos regionales, entrenar a unidades locales en operaciones antinarcóticos y posiblemente llevar a cabo acciones encubiertas, dijo gente familiarizada con el asunto”.

El nuevo proyecto que pretende llevar a cabo la CIA no implicaría ser la primera ocasión que la CIA espía contra los cárteles dentro de México.

Tras el secuestro, tortura y asesinato en 1985 del agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena, en Guadalajara, Jalisco, se descubrió que la CIA no solo espiaba al narcotráfico mexicano, sino incluso a sus contrapartes estadunidenses dedicados a combatir al trasiego de drogas.

Por el caso Camarena, la Administración Federal Antidrogas (DEA) registró en sus investigaciones que la CIA proporcionaba armas y le permitía y colaboraba en la exportación de drogas a Estados Unidos a los principales narcotraficantes mexicanos de esa época; Miguel Ángel Félix Gallardo, Rafael Caro Quintero y Ernesto Fonseca Carrillo.

Bajo la presidencia de Felipe Calderón y con la puesta en vigor de la llamada Iniciativa Mérida, el exmandatario mexicano autorizó y permitió a la CIA espiar con licencia a los cárteles del narcotráfico por medio de la Oficina Binacional de Inteligencia (OBI).

Como lo reportó Proceso en su momento, la CIA y todas las demás agencias federales con presencia en México, bajo la venia de Calderón llevan a cabo espionaje contra los cárteles y sobre cualquiera de sus otros objetivos; entre estos políticos.

La CIA y la DEA por medio de la OBI, ayudaron al narcotraficante Genaro García Luna, amigo, asesor, confidente, mano derecha y Secretario de Seguridad Pública de Calderón, a instalar en México un “búnker” de espionaje con el que se extralimitaron las operaciones mexicanos en contra de políticos, periodistas y empresarios.

La llegada a la presidencia de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México puso fin a la OBI y a la Iniciativa Mérida reemplazándola con el Entendimiento Bicentenario y con el cuál se acotaron las operaciones en territorio mexicano de la CIA, la DEA, del Pentágono y otras agencias estadunidenses.

"Riesgosa prioridad"

El reportaje del Washington Post, que cita a fuentes familiarizadas con las nuevas estrategias que se piensan aplicar, califica este nuevo enfoque del gobierno sobre los cárteles como una “potencialmente riesgosa prioridad” para una agencia de espionaje que en los años recientes se enfocó en China, las operaciones antiterroristas en Oriente Medio y África y el apoyo a Ucrania en el contexto de la guerra contra Rusia.

Ahora, el director de la CIA, John Ratcliffe, tiene la intención de trasladar los recursos de la agencia a su misión antinarcóticos y aplicar los conocimientos adquiridos en sus dos décadas de seguimiento, infiltración y desmantelamiento de redes terroristas para luchar contra los cárteles, asegura The Washington Post, citando una fuente anónima que expresó cautela debido a que aún no están plenamente concluidos estos planes.

“Las lecciones aprendidas en el ámbito de la lucha contra el terrorismo son aplicables a la misión de lucha contra el narcotráfico y los cárteles. No se ha aplicado todo el peso de esas lecciones a este problema”, afirmó la fuente.

"Una reacción feroz"

El énfasis –señala el diario, citando a otros informantes– estará puesto en un mayor apoyo de EU a las fuerzas antidrogas en México, sin estar claro si tomarían medidas directas en suelo mexicano.

Ex funcionarios de inteligencia y militares advierten que una operación así provocaría una reacción feroz y dañaría las relaciones entre Estados Unidos y México, incluida la cooperación antidrogas, sostiene el Post.

“No creo que la gente entienda del todo lo que eso podría significar. Una cosa es hacer eso en un entorno sin ley, como Yemen, Somalia o Afganistán”, dijo al WP un ex funcionario de inteligencia estadunidense.

Otro funcionario militar citado por el rotativo asegura que el Pentágono no tiene planes de ese tipo por el momento.

La nota del periódico propiedad del magnate Jeff Bezos menciona la opinión de exfuncionarios de inteligencia, militares y diplomáticos en el sentido de que una estrategia más dura probablemente alejará a México. Un mayor intercambio de inteligencia y capacitación podría ayudar, pero es poco probable que produzca los resultados rápidos y visibles que Trump desea, sostiene el diario.

“No se puede entrar con las armas en mano”, dijo al WP Daniel Gerstein, coronel retirado del ejército de EU que sirvió en Colombia, quien descartó que un enfoque así pudiera ser exitosos.

En su extensa nota, The Washington Post recuerda que la CIA ha tenido un papel secreto desde hace tiempo en la lucha contra el narcotráfico en México. Durante años, menciona, ha trabajado en estrecha colaboración y en silencio con el ejército mexicano para perseguir a los capos de la droga, aun cuando esta cooperación se vio fracturada sobre todo desde el arresto en 2020 del general Salvador Cienfuegos.

“Acciones contraproducentes”

La nota citas declaraciones del congresista demócrata Joaquín Castro, miembro del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, quien considera que las asociaciones de inteligencia con aliados extranjeros son importantes para acabar con los cárteles, aunque consdidera que Hasta la fecha, las acciones de la administración Trump han sido “contraproducentes” para esos objetivos.

“Esta administración no ha presentado un plan creíble para contrarrestar la violencia de los cárteles o proteger a los ciudadanos estadunidenses del crimen transnacional. En cambio, la estrategia de Trump ha consistido principalmente en amenazas grandilocuentes de invadir México, imponer aranceles punitivos al comercio o designar a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras”, dijo Castro.

No es lo mismo combatir a los cárteles que al terrorismo, dice el WP con base en las afirmaciones de exfuncionarios, y pone como ejemplo cuando EU entrenó y equipó a fuerzas locales “aprobadas” en Afganistán. Pero allí, a diferencia de México, el ejército estadunidense y sus representantes controlaban franjas de territorio.

“No creo que Trump esté buscando cosas que se puedan hacer de manera lenta y metódica”, dijo un exfuncionario de inteligencia al diario.

“Un hueso duro de roer”

Finalmente, The Washington Post cita a al exembajador en Colombia William Brownfield, quien recuerda que EU ya había entrenado a unidades antidrogas mexicanas en el contexto de la Iniciativa Mérida.

“Eso funcionó durante un tiempo. ¿Funcionará ahora, con Sheinbaum? No lo sé. México es un hueso duro de roer”, dice Brownfield respecto a la reacción visceral que provocaría la presencia militar o policial estadunidense en territorio mexicano: “No hay absolutamente ninguna manera de hacer esto sin provocar ira”

FUENTE: PROCESO.
AUTOR: J. JESÚS ESQUIVEL.

CIA sobrevuela drones antiterroristas en México, afirma CNN; “es una campañita”, dice Sheinbaum

La Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA, por sus siglas en inglés) notificó al Capitolio de EE. UU., el desplazamiento de aeronaves no tripuladas en espacio aéreo de México y que serían usadas en misiones antiterroristas. en lugares como Somalia y Yemen, según reveló la cadena estadounidense CNN, el 18 de febrero de 2025, citando fuentes oficiales.

Sin mencionar alguna colaboración con el Gobierno mexicano, funcionarios estadounidenses no identificados dijeron a CNN que bajo la nueva Administración del presidente Donald Trump, la CIA lanzó vuelos no artillados del dron MQ-9 Reaper -conocido como Predator B-, para espiar objetivos a los cárteles del narcotráfico mexicanos.

Según detallaron los funcionarios a CNN, la CIA no había sido autorizada a utilizar los drones para llevar a cabo acciones letales, además de que añadieron que no preveían utilizar las aeronaves no tripuladas, para llevar a cabo ataques aéreos. Sin embargo, los agentes de la agencia independiente estadounidense, en México compartían la información recogida, a los funcionarios mexicanos.

El General Atomics MQ-9 Reaper (Segador en inglés), originalmente conocido como Predator B, es un vehículo aéreo no tripulado (UAV), desarrollado por la compañía estadounidense General Atomics Aeronautical Systems y usado por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos.

El MQ-9 dispone de un motor turbohélice de 950 caballos de fuerza. Activos desde el año 2007, es usado en múltiples misiones incluyendo en la frontera México bajo el mando de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés). Es capaz de volar a 15 mil metros de altura sin ser detectado.

Sin embargo, el mismo día, al ser cuestionada al respecto -durante su conferencia de prensa matutina -llevada a cabo desde el Salón Tesorería del Palacio Nacional-, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo respondió en una sola frase: “es parte de esta campañita”, sin abundar más sobre ello.

FUENTE: SEMANARIO ZETA.
AUTOR: CARLOS ÁLVAREZ ACEVEDO.

Espionaje sin control: desde fiscalías hasta gobiernos estatales, Pemex, Guardia Nacional usaron herramientas de vigilancia

Un informe de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D) revela que autoridades, gobiernos e instituciones utilizan las herramientas de vigilancia para espiar a ciudadanos aún sin orden judicial y sin tener facultades legales.

En México, desde las fiscalías hasta gobiernos estatales e incluso instituciones como Petróleos Mexicanos y la Guardia Nacional o la Secretaría de la Defensa Nacional han adquirido y utilizado herramientas de intervención de comunicaciones, extracción de información de dispositivos, geolocalización, y hasta antenas falsas para espiar a ciudadanos, pese a que no tienen facultades legales o no contaron con orden judicial para ello. 

Así lo revela el informe “El Estado de la Vigilancia” de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), que incluye el diagnóstico de la vigilancia en las comunicaciones en el país realizada desde 2012 y hasta 2023, de acuerdo con registros oficiales de las adquisiciones y hallazgos de equipos intervenidos, sobre todo de periodistas, defensores de derechos humanos y políticos.

De acuerdo con datos publicados por el Poder Judicial de la Federación, existe una clara tendencia al alza en la resolución de solicitudes de intervención de comunicaciones privadas por parte de jueces federales en los últimos años. 

Mientras en 2017, el último año de gobierno de Enrique Peña Nieto, los jueces recibieron mil 756 solicitudes para intervenir comunicaciones, en 2018, el año de la transición, hubo 5 mil 881  y para 2023 registraron 10 mil 626, lo que representa un crecimiento de 80% en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador. 

Sin embargo, existe evidencia de que las autoridades utilizan las herramientas de vigilancia aún sin orden judicial y sin tener facultades legales.

Por ejemplo, si bien la Guardia Nacional reportó haber solicitado la autorización para la intervención de comunicaciones privadas 92 veces en el año 2020, en una respuesta a una solicitud de acceso a la información realizada por R3D, la Guardia Nacional reportó haber intervenido las comunicaciones privadas de 289 líneas telefónicas (3.14 líneas por solicitud).

Además, aunque instituciones como las Fiscalías tienen la obligación de reportar las solicitudes de intervención de las comunicaciones, en 2020, la Fiscalía General de Chihuahua reportó en la Plataforma Nacional de Transparencia haber realizado 524 solicitudes de intervención de comunicaciones privadas. Pero en respuesta a solicitudes de información, dijo haber realizado 601. 

Sobre el acceso a datos conservados y geolocalización a empresas de telecomunicaciones, R3D advierte que “existen otros indicios de un mayor subregistro derivado del abuso del mecanismo excepcional contemplado en el artículo 303 del CNPP, para solicitar directamente el acceso a datos conservados a las empresas de telecomunicaciones sin control judicial previo y sujeto a la ratificación posterior por parte de la autoridad judicial federal”.

A partir de los datos obtenidos mediante solicitudes de acceso a la información, entre 2016 y 2019, las autoridades admiten que al menos el 57.3% de las solicitudes reportadas fueron realizadas sin control judicial previo, de las cuales el 76.7% fueron realizadas invocando las causales de excepción a las que se refiere el artículo 303 del CNPP y de ellas, el 39.5% no fueron ratificadas total o parcialmente.

Entre los abusos que se han documentado, se encuentra evidencia revelada por The New York Times en noviembre de 2023 sobre cómo la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México accedió a registros telefónicos, mensajes de texto y datos de localización de diversas figuras políticas, tanto del partido gobernante como de la oposición.

La Fiscalía solicitó esta información a la empresa de telecomunicaciones Telcel, argumentando que estos datos serían utilizados en investigaciones sobre secuestros y desapariciones e invocando las causales de excepción de la autorización judicial previa a las que se refiere el artículo 303 del CNPP.

Sin embargo, R3D sostiene que se trata de un “modus operandi”, toda vez que también le ocurrió a la periodista Marcela Turati, la cofundadora del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), Mercedes Doretti, y la defensora de derechos humanos Ana Lorena Delgadillo, quienes señalaron que la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) accedió a sus registros telefónicos al incluirlas en en la misma carpeta donde se investigaba a integrantes de una organización delictiva.

“A partir de estos casos se ha apreciado un modus operandi en el que las fiscalías abren una investigación o usan una existente y, con base en ‘información anónima’, solicitan a las empresas de telecomunicaciones que les den información de números que no guardan relación con algún delito. De esta forma se utilizan carpetas sobre secuestro u otros delitos graves con la intención de eludir la obligación de obtener autorización judicial federal de manera previa”, señala el informe.

La organización R3D documentó en “El estado de la Vigilancia” que en México se han usado herramientas como FinFisher de Gamma International, Galileo de Hacking Team, Pegasus de NSO Group y Reign de Quadream para infectar equipos y acceder a toda la información del usuario. 

También han utilizado herramientas de extracción forense e incluso antenas falsas y geolocalización basada en la explotación de vulnerabilidades en la infraestructura de telecomunicaciones. 

En 2013 y 2015, una investigación de Citizen Lab –laboratorio multidisciplinario de la Universidad de Toronto– reveló evidencia sobre la presencia de servidores de comando y control de FinFisher en 32 países, incluyendo en México.

Sobre Galileo de Hacking Team, gracias a una gran cantidad de correos electrónicos y documentos internos de la firma italiana Hacking Team fueron filtrados al público el 5 de julio de 2015, se demostró que la empresa de software de espionaje había vendido sus productos a gobiernos de países bajo graves crisis de derechos humanos, tales como Baréin, Sudán o Uzbekistán. De un total de 35 naciones. 

En México, los gobiernos locales mencionados con relaciones comerciales con Hacking Team se encuentran: Baja California, Campeche, Chihuahua, Durango, Estado de México, Guerrero,  Jalisco, Nayarit, Puebla, Querétaro, Tamaulipas y Yucatán; así como dependencias como la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), la Policía Federal, la Procuraduría General de la República (PGR) y Petróleos Mexicanos (Pemex).

Otro ejemplo es Pegasus de NSO Group, una compañía israelí que asegura dedicarse a “proveer a gobiernos autorizados con tecnología que los ayude a combatir el terror y el crimen; la compañía vende solo a agencias gubernamentales autorizadas, y cumple cabalmente con estrictas leyes y regulaciones de control de exportaciones”

El primer antecedente de Pegasus en México se registró en 2012, cuando investigaciones periodísticas publicaron que la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) se convirtió en el primer cliente internacional de NSO Group, al adquirir el sistema Pegasus como parte de una serie de contratos celebrados con la empresa Security Tracking Devices S.A. de C.V., los cuales ascendieron a 5.6 mil millones de pesos.

El espionaje continuó en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, en 2019 y 2022, toda vez que existe evidencia de que la Sedena adquirió un software a la empresa autorizada para la venta del software en México, con el que accedió a la comunicación celular del defensor de derechos humanos, Raymundo Ramos, el periodista Ricardo Raphael y un periodista de Animal Político.

También se realiza vigilancia masiva con antenas falsas, aunque México no tenga un marco legal de regulación. Mediante una serie de solicitudes de acceso a la información pública realizadas por R3D, se ha documentado la compra de antenas falsas por parte de diversas autoridades como las Procuradurías de Baja California, de la Ciudad de México, Morelos, Nayarit, Quintana Roo, Puebla. 

Además, documentos internos de la SEDENA revelan la adquisición y uso de antenas falsas de marca Verint, Modelo Engage Pi2, también denominado por el Ejército como “Sistema GSM Pasivo”.

Pese a la ilegalidad del espionaje, en México no hay un solo sentenciado por ello, y las autoridades ni siquiera han realizado el trabajo de investigación de manera expedita. en 2017, 2022 y 2023, las personas vigiladas por el spyware Pegasus, principalmente personas defensoras de derechos humanos y periodistas, presentaron denuncias penales ante la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE), pero hasta el momento no han hallado a ningún responsable. 

“La Fiscalía, entre otras deficiencias, se ha negado a realizar actos esenciales de investigación, ha obstruido y fragmentado las investigaciones, ha hecho recaer la carga de la prueba en las víctimas y les ha negado copia de los expedientes”, afirma el informe.

Respecto a la más reciente investigación sobre el abuso de Pegasus por parte del Ejército entre 2019 y 2022, la Fiscalía no ha logrado ningún avance en más de dos años. Ni siquiera ha podido obtener los contratos en los que el Ejército obtuvo licencias para operar Pegasus. 

Esto porque la Sedena se ha negado a hacer públicos los contratos con NSO Group para la adquisición de Pegasus u otros sistemas de vigilancia, como prometió públicamente el presidente López Obrador,  a pesar de las numerosas pruebas y documentos que muestran el número y las fechas de los contratos, así como los pagos realizados por la institución.

FUENTE: ANIMAL POLÍTICO.
AUTOR: REDACCIÓN.

Sedena y 37 instituciones estatales intervinieron celulares y computadoras en el actual sexenio sin lograr ni una detención

El Ejército incrementó la adquisición de dispositivos para extraer información de celulares en el gobierno de AMLO; autoridades de 23 estados gastaron más de 436 millones 204 mil pesos en licencias para vigilar o extraer información de celulares y computadoras.

El Ejército y 37 Fiscalías, policías y Comisiones de Búsqueda estatales contrataron 168 licencias de dispositivos para vigilar geolocalizaciones y extraer archivos de celulares y computadoras de ciudadanos durante el actual sexenio. Esto implicó un gasto de 459 millones 974 mil pesos.

Aunque la justificación de esas compras fue reforzar las labores de investigación de delitos, ayudar en la búsqueda de desaparecidos o personas en riesgo, ninguna de las instituciones detuvo a presuntos delincuentes, halló o rescató a víctimas, pese a que son las únicas razones por las que podrían hacer esas vigilancias, de acuerdo con la información que proporcionaron. 

Fiscalía de Gertz gasta 142.9 mdp para rastrear celulares y sólo justifica uso en 0.24% de 135 mil casos

La Fiscalía General de la República (FGR), encabezada por Alejandro Gertz Manero, utilizó un software para rastrear la ubicación de personas a través de sus celulares en 135 mil ocasiones entre 2019 y 2021, pero sólo presentó 328 peticiones ante jueces federales para realizar geolocalizaciones y obtuvo la autorización correspondiente, es decir, en 0.24% de los casos, pese a que por ley estaba obligado a siempre solicitarlo.

Fiscalía de CDMX en gestión de Godoy vigiló geolocalización de ciudadanos en 48 mil ocasiones; no reporta delitos resueltos

Durante la gestión de Ernestina Godoy, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México intervino la geolocalización de teléfonos celulares en 48 mil ocasiones solo entre 2020 y 2021, de acuerdo a la propia información proporcionada por la dependencia. Con esto pudo conocer su ubicación sin tener la autorización de un juez para todas las intervenciones, pese a ser un requisito legal. 

Estas vigilancias de geolocalizaciones, sin embargo, no consiguieron la detención de presuntos delincuentes o el rescate de víctimas en riesgo, como lo demuestra la información oficial obtenida mediante solicitudes de transparencia y recursos de revisión.

Un Juez ordena se suspenda intervención telefónica contra Alcaldesa de Álvaro Obregón

El próximo 11 de enero se llevará a cabo la audiencia incidental para resolver si Lía Limón García obtiene la suspensión definitiva.

Un Juez federal ordenó una suspensión provisional para que la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CdMx) no pueda intervenir el teléfono personal de la Alcaldesa de Álvaro Obregón, Lía Limón García, quien es investigada por dicha dependencia.

Lo anterior debido a que la funcionaria presentó una ampliación de la demanda de amparo contra la solicitud de intervención que hicieron las fiscalías de la Ciudad de México, Michoacán y Colima con la finalidad de extraer información de su número celular.

Gertz da a los agentes de la FGR poder para intervenir llamadas y geolocalización

El Fiscal General de la República ha otorgado facultades a los agentes del Ministerio Público para intervenir comunicaciones privadas, obtener la localización geográfica en tiempo real de una persona, llevar a cabo operaciones encubiertas, entre otras.

La Fiscalía General de la República (FGR) ha llegado a cinco años con los principales casos de corrupción que tiene en sus manos —como el de Emilio Lozoya Austin y el de Juan Collado— sin avances importantes, así como con un número de expedientes en el limbo, y ahora suma una polémica más luego de que el Fiscal Alejandro Gertz Manero otorgara funciones de intervención de llamadas a sus agentes, lo cual abre la puerta a espionaje e irregularidades en el manejo de la información, advirtieron organizaciones.

Espionaje continúa en gobierno de AMLO; es falso que ya no se espía

El Presidente Andrés Manuel López Obrador mintió al decir que su gobierno no espía a ninguna persona. Hasta la fecha, se han documentado al menos 10 casos de espionaje durante el actual gobierno. 

En su conferencia matutina del 5 de diciembre de 2023, el presidente López Obrador dijo: “siempre hemos padecido nosotros de espionaje, siempre, y hay. Nosotros no lo hacemos, aquí se terminó eso, no espiamos a nadie, no escuchamos teléfonos de nadie”.

Godoy desmiente al NYT y le acusa de 'sembrar mentiras'

La fiscal afirmó que lo publicado en el medio estadounidense “carece de veracidad", luego de que el diario revelara que espiaban líneas telefónicas.

La titular de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, Ernestina Godoy, afirmó que la dependencia a su cargo no practica el espionaje “mucho menos el político”, como lo informó el The New York Times.

El periódico estadounidense publicó este jueves que la Fiscalía capitalina espía líneas telefónicas de políticos de oposición y de Morena.

En mandato de Sheinbaum, FGJCDMX vigiló teléfonos de opositores y aliados de Morena: New York Times

Al menos 14 expedientes judiciales revisados por el diario muestran que la Fiscalía, a cargo de Ernestina Godoy, pidió a la empresa Telcel del magnate Carlos Slim, entregar registros telefónicos y de mensajes de texto, así como datos de localización.

A partir de 2021, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) mandó investigar las líneas telefónicas de figuras de la oposición y de Morena en la zona metropolitana, como el panista Santiago Taboada Cortina –quien aspira a gobernar la ciudad—o la senadora Lilly Téllez, pero también de Higinio Martínez Miranda, y Horacio Duarte Olivares, dos de los principales operadores políticos de Morena en el Estado de México.

De acuerdo con un reportaje publicado hoy por el New York Times, durante el mandato de Claudia Sheinbaum Pardo en la ciudad, la dependencia dirigida por Ernestina Godoy –quien busca su ratificación en la fiscalía capitalina-- solicitó a la justicia el acceso a los registros telefónicos de una docena de políticos, y obtuvo los datos de la empresa Telcel, propiedad del multimillonario empresario Carlos Slim.

"Conservadores autoritarios” fueron los que espiaron a Alejandro Encinas: AMLO

López Obrador reiteró que su gobierno no espía a ningún ciudadano, periodista “y mucho menos a servidores públicos, a nadie”, en este caso que involucra a Encinas, de quien se comprobó que su celular fue infectado por Pegasus mientras investigaba el caso de Ayotzinapa.

Ni el gobierno federal, ni el Ejército, ni el servicio de inteligencia espiaron al subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, insistió el presidente Andrés Manuel López Obrador y reiteró que su gobierno hace inteligencia y “lo demás es invención”.

AMLO: Pentágono espía a Fuerzas Armadas; se cuidará información de seguridad nacional

Ayer, el mandatario calificó de “intromisión abusiva” y “prepotente” la infiltración de la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) en la organización criminal “Los Chapitos”, facción de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador denunció la mañana de este martes que México es objeto de espionaje por parte del Pentágono de Estados Unidos, por lo que, anunció, se cuidará toda la información de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Secretaría de Marina (Semar).

Luego de ser cuestionado por las actividades que aún realiza el Ejército mexicano en materia de espionaje, aseguró que se trata de labores de inteligencia y aprovechó para revelar que tomó la decisión de resguardar los datos de las Fuerzas Armadas con la finalidad de velar por la seguridad nacional del país.

EU espió a miles de objetivos en México con spyware Landmark: NYT

Una agencia de gobierno –no identificada-- compró el sistema de espionaje en noviembre de 2021, a través de una sociedad intermediaria de New Jersey llamada Riva Networks, que había vendido una versión de Pegasus al FBI en 2019; en el contrato de 2021, su director firmó con un nombre apócrifo.

A pesar de las interdicciones de la Casa Blanca y del Departamento del Comercio, una agencia de seguridad de Estados Unidos adquirió a la empresa israelí NSO Group un programa de geolocalización de celulares llamado Landmark –un sistema distinto a Pegasus, spyware desarrollado por la misma empresa--, y lo utilizó en “miles de ocasiones” contra blancos en México, reveló hoy el New York Times.

De acuerdo con el rotativo, una agencia de gobierno –no identificada-- compró el sistema de espionaje en noviembre de 2021, a través de una oscura sociedad intermediaria de New Jersey llamada Riva Networks, que había vendido una versión de Pegasus al FBI en 2019; en el contrato de 2021, su director firmó con un nombre apócrifo.