AUTOR: ÁNGEL PLACENCIA.
Después de ser declarado culpable, un pederasta internacional acusó de extorsión al abogado que defendía a las víctimas y logró llevarlo a prisión en Puerto Vallarta. En entrevista para Reporte Indigo el defensor detalla el lado oscuro de este sonado caso.
Es como recuerdo que huele el cansancio: a sudor rancio de muchos presos, de varios días, guardado en las esquinas.
Este mismo olor se impregna con el paso de tantos cuerpos en los muros que tienen encerrado a Mauricio desde que su defensa a las víctimas del pederasta Thomas White, le costó su libertad.
Son las mismas paredes que tuvieron en cautiverio por varios años al propio White, quien murió en un hospital privado de Puerto Vallarta el pasado 10 de septiembre.