AUTOR: ÁNGEL CABRERA.
La Cámara de Diputados selló el acta de defunción del Instituto Federal Electoral. Ayer, a las 12:30, los legisladores declararon la validez constitucional de la reforma político-electoral y sólo se espera su promulgación para que el IFE deje de existir.
Apenas unos minutos después de que en el Poder Legislativo firmará la sentencia de muerte, la noticia llegó al instituto y cayó como balde de agua fría a los consejeros. Incluso, Lorenzo Córdova detuvo unos segundos la sesión para informar al Pleno que la cámara baja había declarado válida la reforma.
Al tiempo que los cuatro consejeros se declaraban incompetentes para atraer el caso del supuesto despilfarro de recursos en publicidad del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, el silencio inundó el salón de sesiones.
Y no sólo los rostros de los consejeros se transformaron en una expresión de tristeza. La desesperanza alcanzó también a los mandos medios, altos y asesores del IFE. Sentados en la parte de atrás, al escuchar el anunció de Córdova, sus facciones cambiaron y un ambiente de luto inundó al instituto.