AUTOR: MARCELA TURATI.
TLAPA, Gro. (apro).- Escríbale ahí: “Estamos luchando por la reubicación de nuestro pueblo porque la tierra se está yendo. Estamos luchando en beneficio del pueblo, que el gobierno nos dé una casa que sirva un tiempo, que sirva para nuestros hijos, que no nos engañe otra vez porque ¿para qué da casas que no sirven?”.
La que dicta la petición es Natividad Gregorio Avilés, una damnificada, quien sobrevivió a las lluvias que durante las fiestas patrias que taladraron las casas de su pueblo, el piso, los caminos y los montes aledaños.
El día del Apocalipsis en El Tepeyac, su pueblo, ubicado en el municipio de Malinaltepec, ella con su esposo y sus seis hijos se refugiaron en el mercado pero al escuchar el rugido del río se fueron con todos al cerro, a acampar a un lado del camino roto, sin comida, bajo un tendedero de plásticos que no ahuyentaba el frío de los huesos. Salió hasta que Protección Civil los rescató y los reinstaló en una escuela convertida en albergue en este que no es su municipio.