MÉXICO, D.F. (apro).- Con el Foro Económico Mundial como escenario, el presidente Enrique Peña Nieto encomió en Davos, Suiza, las reformas estructurales aprobadas recientemente en México, en particular la energética, cuyos resultados –dijo– se verán a finales de año con nuevas inversiones.
No obstante, la situación de violencia que priva en Michoacán, aunado a la ejecución del mexicano Edgar Tamayo, en Texas, Estados Unidos, acaparó la atención de los asistentes durante su participación.
México es un país de Estado de derecho, y en un año se ha logrado reducir 30% el número de homicidios vinculados a la delincuencia organizada, presumió el mandatario mexicano durante su conferencia magistral Transformando a México: sociedad, política y economía.
En particular, Peña destacó las reformas educativa, en telecomunicaciones, financiera, fiscal y energética, pero al finalizar su discurso, Klaus Schwab, presidente del Foro Económico Mundial (WEF por sus siglas en inglés), le hizo dos preguntas, una de ellas relacionada con el tema de la seguridad en México.