AUTOR: ICELA LAGUNAS.
Aunque habían detectado ‘trabajos mal ejecutados’ y vicios ocultos en la construcción de la Línea 12, directivos del Metro firmaron de recibido la obra que hoy permanece cerrada.
Corría el primer minuto del 30 de octubre de 2012. Un grupo de ingenieros reunidos en las oficinas de Proyecto Metro discutían los trabajos faltantes y mal ejecutados de la Línea 12.
La obra aún no estaba lista pero urgía entregarla. Ese día, Marcelo Ebrard cortaría el listón.
Los ahí reunidos –ingenieros de Proyecto Metro y del Consorcio Constructor, ICA, CARSO y ALSTOM– firmaron la hoja de entrega-recepción. Marcelo Ebrard había prometido inaugurar la línea en compañía de un grupo de poderosos de México.
No había marcha atrás, terminada o no, la Línea 12 tenía que estar en funcionamiento de manera inmediata.