Tras la confrontación entre elementos de la policía y una barra de aficionados de "Chivas", el edil de Jalisco decidió remover de su cargo al titular de la dependencia y a otros mandos.
Ramiro Hernández García, alcalde de Guadalajara, destituyó de su cargo a tres principales mandos de la policía tras la investigación de los hechos violentos del sábado pasado en el Estadio Jalisco, que dejó como saldo a 21 policías lesionados por integrantes de una barra del equipo de futbol “Chivas”.
“Le he pedido la renuncia a sus cargos al maestro Carlos Mercado Casillas, Comisario de Seguridad Ciudadana de Guadalajara; al licenciado Alfredo Jiménez Sánchez, inspector Operativo de las Fuerzas de Seguridad Ciudadana de Guadalajara, y a José de Jesús de Anda Zambrano, supervisor Operativo de las Fuerzas de Seguridad Ciudadana de Guadalajara”, declaró ayer Hernández García.