AUTOR: YETLANECI ALCARAZ.
Alemania avanza en su investigación sobre la presunta responsabilidad de la empresa Heckler & Koch en la venta ilegal del G-36 a varios estados de México donde se “violan los derechos humanos”. Algunos de esos fusiles han terminado en manos de miembros de las policías comunitarias de Guerrero, según el documental Armas de exportación mundial fuera de control –que la televisora franco-alemana ARTE transmitirá este martes 4–, el cual ofrece además nuevos indicios de que la Secretaría de la Defensa habría “pirateado” el modelo alemán para fabricar el FX-05 Xiuhcóatl.
BERLÍN: El verde valle sobre el que se asienta la ciudad de Tixtla, Guerrero, muestra aún los estragos del huracán Manuel. A las imágenes de la desgracia natural se agregan las provocadas por el hombre: calles vacías donde sólo se aprecia a policías federales armados y hombres y mujeres con uniformes improvisados –pantalones de mezclilla y camisas cafés– que patrullan a bordo de una camioneta. Un par de escopetas son sus armas. Es la policía comunitaria.
En la cúspide de una de las montañas que bordean la ciudad está el cuartel general de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC). En primer plano aparece su líder Gonzalo Molina González, quien sereno, sentado en una silla, explica a sus entrevistadores: “Nuestras armas son sencillas: escopetas de cacería permitidas por las leyes del Ejército mexicano.