Grupo Sombra, también conocido como “Mafia Veracruzana”, nuevamente trasciende en los titulares de la prensa tras el motín en el Centro de Readaptación Social (Cereso) del municipio de Tuxpan, al norte del estado de Veracruz, que dejó un saldo de al menos ocho personas muertas.
El Grupo Sombra, también conocido como “Mafia Veracruzana”, ha cobrado notoriedad por el control que ha mostrado tener en Veracruz en el delito de extorsión: primero al exhibir la cara más cruenta de esta práctica con el homicidio de la maestra Irma Hernández y, ahora, tras el motín en el Penal de Tuxpan, al evidenciar el impacto que tiene al operar dentro de los centros penitenciarios.
Ayer, la Secretaría de Seguridad Pública de aquella entidad confirmó por la tarde siete personas muertas; sin embargo, por la noche se reportó el fallecimiento de William Alexis Molina Cabrera, quien murió mientras recibía atención médica tras resultar lesionado en la reyerta.
De acuerdo con lo que informan medios y periodistas locales, con base en videos grabados dentro del penal, la gresca inició ante el hartazgo de los internos por los abusos del llamado Grupo Sombra, quienes cobran extorsiones y amenazan desde el penal tanto a los reclusos como a sus familias. En una de las grabaciones, un hombre identificado como Alonso Delgado dice haber controlado el penal en nombre de dicho grupo criminal hasta que fue relevado de sus funciones. Esta persona señala que el Grupo Sombra controla el cobro de cuotas, así como el ingreso de droga y otros delitos, con el apoyo de las autoridades penitenciarias.
El Grupo Sombra o Mafia Veracruzana representa uno de los rezagos más violentos del pasado reciente de Veracruz, al ser una organización criminal que nació como brazo sicarial del Cártel del Golfo con el objetivo de combatir a Los Zetas en el norte del estado, pero que con el paso de los años se fragmentó, se independizó y se transformó en un grupo dedicado principalmente a la extorsión. Este grupo se ha caracterizado por llevar la extorsión a un extremo cruel, imponiendo terror y grabando a sus víctimas previo a asesinarlas.
La grabación de la maestra Irma Hernández, quien fue atacada por el grupo por no pagar una extorsión, no es el único ejemplo de cómo esta organización ha recurrido a tácticas de extrema violencia como herramienta de control territorial. En diciembre de 2018 también circuló un video en el que supuestos miembros de ese grupo presuntamente decapitaban a una mujer identificada como «Comandanta Paty», presunta operadora de Los Zetas. En la grabación, los agresores portaban chalecos con las siglas del grupo y afirmaban no usar las mismas tácticas que sus rivales.
De acuerdo con el analista de seguridad Víctor Sánchez, este grupo surgió en un contexto de disputas sangrientas por el control de Veracruz, un estado que desde hace más de dos décadas ha sido escenario de conflictos entre grandes cárteles, facciones rotas y nuevos grupos que se disputan cada kilómetro de territorio mediante la violencia y el control social.
El Grupo Sombra empezó a hacerse visible y conocido a finales del Gobierno de Cuitláhuac García. De acuerdo con archivos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), revelados por el colectivo de hackers Guacamaya Leaks, la Mafia Veracruzana aumentó su influencia en el estado durante el sexenio de Cuitláhuac García.
Fue en 2017 cuando este grupo se dio a conocer por repartir regalos a la población en fechas como el Día de las Madres o Navidad, y algunos de sus miembros posaron en fotografías portando armas y chalecos con las siglas F.E.G.C. (Fuerzas Especiales Grupo Sombra), iguales a los que vestían en el video de la mujer decapitada.
A medida que la organización creció, se posicionó como uno de los grupos criminales más poderosos en la zona, con un control cada vez mayor sobre las actividades ilícitas en el norte de Veracruz, una región que ha sido disputada durante años. El analista en seguridad recordó que cuando Veracruz estaba bajo el Gobierno de Fidel Herrera, el Cártel del Golfo comisionó a Los Zetas —entonces su brazo armado— para expandir su dominio sobre la mayor parte del territorio veracruzano. Los Zetas lograron monopolizar el crimen organizado en la entidad, pero posteriormente, ya durante el mandato de Javier Duarte, se dio el rompimiento formal entre ambos grupos criminales.
“La escisión llevó al Cártel del Golfo a combatir al aparato sicarial que ellos mismos habían enviado a tomar Veracruz, mientras que, por otro lado, el Cártel de Sinaloa observó con preocupación la expansión de Los Zetas y envió a un grupo denominado ‘Los Matazetas’ para recuperar el control”, detalla el analista.
Este escenario de enfrentamientos, rupturas y expansión territorial abrió la puerta a nuevas configuraciones del crimen organizado, y así surgió Grupo Sombra, creado por el Cártel del Golfo como una fuerza destinada a combatir a Los Zetas y posteriormente al CJNG, específicamente en el norte de Veracruz y zonas colindantes con Tamaulipas. Con los años, Grupo Sombra rompió con el Cártel del Golfo y adoptó el nombre de Mafia Veracruzana, con el cual también opera actualmente.
El territorio de operación de este grupo es principalmente el norte de Veracruz, algunos municipios del sur de Tamaulipas y zonas que colindan con San Luis Potosí. Algunos de los municipios donde se reporta su presencia son: Pánuco, Tuxpan, Tantoyuca, Tihuatlán y Álamo Temapache.
Desde el año pasado, la Mafia Veracruzana ha seguido cobrando notoriedad al adjudicarse, a través de mensajes en redes sociales, ataques y amenazas.
La actual geografía del crimen organizado en Veracruz está dividida. En el norte, el CJNG combate a Grupo Sombra (Mafia Veracruzana) y a algunas células remanentes del Cártel del Golfo. En el centro, el CJNG se enfrenta al Cártel de Sinaloa y a Sangre Nueva Z, mientras que en el sur su disputa es contra los Zetas Vieja Escuela, con presencia esporádica del Cártel de Sinaloa y una operación poco clara de “La Barredora”.
La operación de Grupo Sombra se ha vuelto particularmente destructiva por la forma en que se involucra en la extorsión. Víctor Sánchez destaca un caso reciente ocurrido en la zona norte del estado, donde fue asesinada la maestra Irma Hernández Cruz, una maestra jubilada y taxista. Fue un homicidio que mostró la forma más cruel de extorsión: la extorsión cruzada, es decir, aquella en la que dos o más grupos criminales extorsionan a una misma persona o sector.
En este caso, explica Sánchez, tanto CJNG como Mafia Veracruzana exigían pagos a la profesora. Ella pagó al CJNG y fue asesinada por Mafia Veracruzana en represalia. “Esto es una doble victimización. Era una persona jubilada que trataba de salir adelante. El Estado no la protegió. Pagó a una organización y la otra se lo tomó a mal. Es una gran tragedia que demuestra la ausencia del Estado a nivel municipal, estatal y federal”, señala.
El analista Víctor Sánchez advirtió que lo que ocurre en Veracruz es solo una muestra de lo que sucede en otras partes del país. “La extorsión cruzada se vive en muchas ciudades: Morelos, Acapulco, Hermosillo, Ciudad Juárez, Tijuana, donde la sociedad está a expensas de dos o más organizaciones criminales y eso es gravísimo”.
AUTOR: SUGEYRY ROMINA GÁNDARA.
No hay comentarios: